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«Todos los políticos por ley deberían viajar en colectivo, ir al hospital y a la escuela pública», planteó Vilma Ripoll.
La precandidata a vicepresidente de la Nación por el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) Nueva Izquierda, Vilma Ripoll (62), visitó la ciudad este martes a la mañana y, en tren de campaña, diálogo con El Día de Escobar sobre la coyuntura política nacional y sus expectativas de cara a las elecciones primarias de agosto.
“Somos una fuerza nacional que va a participar en veinte provincias. Ahora estamos recorriendo la provincia de Buenos Aires y vemos muchos problemas complejos. Es una provincia rica con un pueblo pobre. Aunque el Estado nacional no quiera contarlos, uno los ve. Hay una disputa cotidiana por la supervivencia”, expresó inicialmente la histórica militante santafesina.
En ese sentido, planteó que “todos los políticos, desde el presidente hasta el que está más abajo, tendrían que ganar lo mismo que gana un director de escuela; y por ley deberían viajar en colectivo, ir al hospital y a la escuela pública, porque pretendemos que vivan los apremios diarios que tiene la gente y eso hoy no sucede”.
“Esta política de los partidos tradicionales –llámese PJ, UCR, PRO- es un trampolín hacia el enriquecimiento personal y una vida de privilegios. Y para sostener esos privilegios hacen acuerdos y negociados con todos los grupos económicos grandes. Ninguno de los presidenciables representa un cambio. En su esencia son más de lo mismo y por eso van de un partido a otro como si estuviera abierto el libro de pases”, afirmó Ripoll, golpeando por elevación al intendente Sandro Guzmán.
Según su análisis, esta coyuntura política actual, marcada por la “decadencia de ideales” y el “fin del kirchnerismo”, favorecería y debe ser aprovechada por los espacios de izquierda. “Eso nos da un crecimiento. De hecho, en la última –elección- general la izquierda sacó más de 1.600.000 votos. El tema de la coherencia tiene su peso a la hora de la votación. El apoyo a las luchas obreras y las propuestas serias también”, reflexionó la ex legisladora de la ciudad de Buenos Aires.
Igualmente, Ripoll se mostró muy crítica de sus pares del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) y del Frente Popular por “sectarios” y “cerrados”. “Nosotros planteamos la unidad de la izquierda, porque opinamos que tiene que dejar de ser testimonial y postularse para disputar el poder de verdad, como ocurre en Grecia o España. Es una oportunidad para seguir creciendo porque ahora la gente nos mira y escucha, porque ya no cree que nos vayamos a quedar con la casa y el auto. El banco se los queda”, señaló la referente del MST.
“A esta altura del siglo necesitamos de una izquierda que no sea dogmática, que sea plural, que esté abierta a vivir con diferencias, a debatirlas, a definir las candidaturas de manera democrática. Este es el momento y lamentablemente ellos no lo ven. Por eso nos llamamos Nueva Izquierda y le pedimos a la gente que nos fortalezca con su voto”, concluyó la precandidata a la vicepresidencia de la Nación.
Sin PASO
A raíz de esta marcada división, los partidos de izquierda no competirán internamente en las PASO, aunque deberán alcanzar el 1,5% de los votos para llegar a los comicios generales de octubre.“Nos ponemos como objetivo pasar el piso nacional para seguir disputando después en las presidenciales”, aseveró la dirigente.
Impuestos progresivos; mayor presupuesto en Salud y Educación Pública; créditos blandos para vivienda y combatir la pobreza junto a la corrupción policíaca-judicial para erradicar la inseguridad son algunas de las propuestas del MST-Nueva Izquierda, cuya nómina a nivel nacional será encabezada por el diputado porteño Alejandro Bodart.
El precandidato a gobernador de la provincia será Guillermo Pacagnini, y quien se postulará para intendente es Daniel Taborda, un joven de 25 años y empleado del hospital Erill.
