Unidades cero kilómetro y tecnología de punta para las líneas comunales

Durante el acto de reinauguración de la terminal de ómnibus de Belén de Escobar, este lunes a la tarde, también ocurrió otro hecho significativo: el intendente Ariel Sujarchuk presentó el nuevo servicio de transporte comunal, con colectivos cero kilómetro dotados de alta tecnología.

La adjudicación de los once recorridos municipales que se renovaban -del 500 al 511- ya era un hecho desde el miércoles 10 de octubre, cuando el Concejo Deliberante aprobó por mayoría

la concesión a las tres empresas que ya venían prestando este servicio en el partido de Escobar: La Isleña SRL (La Nueva Metropol), Línea Sesenta y MOTSA. Pero aún restaba la firma del intendente Ariel Sujarchuk para hacerlo oficial.

El jefe comunal decidió esperar para rubricar los contratos en el mejor de los escenarios: la reinauguración de la terminal, ante cientos de vecinos, y presentando algunos de los colectivos cero kilómetros que a partir de ahora trasladarán pasajeros de una punta a la otra del distrito, con tecnología de punta. Dos requisitos fundamentales que se establecieron para las nuevas concesiones, que apuntan a mejorar y modernizar el servicio.

De acuerdo a la flamante regulación, la mitad de la flota -unas 65 unidades- debe ser cero kilómetro, mientras que la otra mitad no puede superar los cinco años de antigüedad. El parque móvil se incrementará en un 30%, con 75 coches nuevos más ocho de reserva, y un 10% de las unidades debe contar con rampas para personas con movilidad reducida.

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Además, en forma progresiva y experimental deberán implementar un sistema que permita el traslado de bicicletas.

En el plano tecnológico, las unidades cuentan con un sistema de posicionamiento global (GPS) que permitirá hacer el seguimiento en tiempo real del recorrido de cada colectivo y conocer el momento exacto de arribo a la parada, a través de la aplicación “Escobar Florece”. Esta herramienta estaría disponible para los usuarios a partir del 1º de febrero.

Asimismo, los colectivos tienen cámaras de seguridad a bordo y un botón antipánico que replicará las alertas al Centro de Monitoreo Municipal, en Garín.

Las once líneas comunales están identificadas por el color celeste, para evitar confusiones con líneas provinciales de las mismas empresas. Y desde este lunes deben prestar servicio durante las 24 horas, con una frecuencia no mayor a los 15 minutos en los horarios pico.

De esta forma, no quedan dudas que el Municipio motorizó un cambio tan significativo como necesario en el transporte público. Pero ahora tiene una tarea mayor: controlar a las empresas -de siempre- para que la mejora no quede en la teoría.

Por Damián Fernández