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Anfitrión. Hirose, en la apertura de la exposición de 2016. Las cuentas no cierran en la entidad.
El presidente de la entidad escobarense no anduvo con vueltas sobre la situación económica: “No nos alcanza, todos los meses tenemos que estar buscando dinero para pagar los sueldos”, reveló.
Hace rato que a la Fiesta de la Flor no le sobra un peso. Al contrario, siempre anda con lo justo y menos para cubrir sus gastos fijos, a pesar del ligero repunte de las últimas exposiciones. Encima, este año no contará con el habitual subsidio del Ministerio de Turismo de la Nación, lo que obligará a la entidad a ajustar aún más su apretado cinturón.
«Financieramente, la Fiesta de la Flor está fundida, como la mayoría de las instituciones», reveló, sin apelar a eufemismos, su presidente, Tetsuya Hirose. «No nos alcanza, tenemos que estar todos los meses buscando dinero para pagar los sueldos», le dijo a El Día de Escobar.
El directivo de la entidad de la calle Gelves ahondó: «Tener empleados antiguos nos genera un costo fijo muy alto en la masa salarial. Y lamentablemente hay pocas actividades importantes durante el resto del año para alquilar los pabellones, que ya están quedando viejos y no reúnen las comodidades que buscan las empresas».
La situación podría ser mucho peor, ya que hasta el año pasado la Fiesta de la Flor cargaba con una deuda judicializada de casi medio millón de pesos por tasas de 2014 y 2015 que el Municipio no quiso eximirle de pagar, a contramano de la práctica de todos los años. Para alivio de la entidad, en octubre de 2016 el monto le fue condonado por el Concejo Deliberante, aunque en votación dividida.
«Si no fuera por la condonación de esa deuda, ya estaríamos listos», graficó Hirose sobre la crítica situación económica de la institución, que este año se verá agravada por el retiro del subsidio que recibía del Ministerio de Turismo de la Nación.
Para peor, Fenix Entertainment Group no renovó para este año el vínculo que había tenido con la entidad en la exposición de 2016, donde organizó los recitales de Agapornis y Karina y se encargó de darle amplia difusión al evento en canales de cable y emisoras radiales. Por distintos motivos, ninguna de las dos partes quedó muy conforme con la experiencia como para repetirla.
«No llegamos a un acuerdo. Ellos no tenían interés. También vino otra empresa. Pero todos quieren hacer negocios usando la marca de la Fiesta de la Flor y eso nosotros tenemos que cuidarlo», expresó Hirose.
Así las cosas, el único sponsor oficial de la 54º edición será la Municipalidad de Escobar. Muy poco para una celebración de carácter nacional con más de medio siglo de historia.
