-
-
Ante la caída de los ingresos por la crisis económica y el fuerte ajuste del gobierno nacional en el gasto público, varios intendentes del Conurbano bonaerense decidieron implementar una serie de tasas e imposiciones para equilibrar sus cuentas.
Entre las medidas adoptadas, los jefes comunales ya avanzaron con la implementación o el aumento de la denominada tasa vial, que se cobra sobre el precio de los combustibles y, por lo general, se destina al mantenimiento de las calles y avenidas del ejido urbano.
Del total de comunas que conforman el Gran Buenos Aires, cerca de veinte ya aplican o tienen previsto implementar esta tasa, según publicó Infobae. El valor de este tributo varía entre el 0,9% y el 2,5% del precio del litro de combustible, aunque algunas jurisdicciones también establecieron un monto fijo.
Este gravamen consiste en cobrar un sobreprecio a cada litro de nafta y gasoil o metro cúbico de GNC que se cargue en las estaciones de servicio. Aunque las alícuotas son pequeñas, el volumen de expendio genera ingresos significativos para las arcas locales.
Escobar es uno de los distritos donde la tasa se viene aplicando desde hace varios años. De hecho, la ordenanza que creo la tasa vial data de 2013.
Origen de la tasa vial
A fines de 2012, algunos intendentes bonaerenses tomaron la polémica decisión de crear un gravamen directo sobre los combustibles para destinar a obras de mantenimiento vial. Muchos jefes comunales, como Sandro Guzmán, también lo intentaron, pero finalmente depusieron ante el regaño público de la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Sin embargo, la idea fue reflotada un año después en el partido de Escobar por el intendente interino Walter Blanco, quien logró apoyo legislativo para incorporar ese gravamen a las ordenanzas Fiscal y Tributaria.
Para entonces, esta nueva gabela ya estaba vigente en los partidos de San Miguel y Vicente López, pese a existir varios cuestionamientos judiciales. Aun así, todas las intendencias alineadas al Frente Renovador replicaron la tasa vial.
En Escobar, para el año 2014 se contempló el cobro de 10 centavos por litro de nafta o gasoil y de 5 centavos por metro cúbico de GNC. En aquel momento, se calculaba una recaudación de 4 millones de pesos, equivalente poco menos que al 1% del Presupuesto Municipal.
La inclusión de este tributo en el régimen impositivo local se aprobó en la sesión del viernes 20 de diciembre de 2013, en votación dividida: la aprobaron los 10 concejales del Frente Renovador y los 5 del vecinalismo, mientras que el bloque del Frente para la Victoria la rechazó.
Con el tiempo, el valor de esa tasa se actualizó sucesivamente por la inflación, hasta que se determinó una alícuota. En la actualidad, en las estaciones de servicio escobarense se aplica un canon de 1% por litro de nafta y de 0,9% por litro de gasoil o metro cúbico GNC.
Ranking de municipios
Los municipios de Merlo, Pilar y Moreno encabezan el ranking de municipios donde es más cara la tasa vial. En el distrito que conduce el intendente peronista Gustavo Menéndez rige una alícuota del 2,5% para los combustibles líquidos y de 4,5% para el GNC.
El pilarense Federico Achával, también de Unión por la Patria, decidió este año crear una de estas tasas por valores similares. Otro de los distritos que decidió innovar es Quilmes, donde la intendenta Mayra Mendoza (UxP) logró que el Concejo Deliberante aprobara la aplicación de un 2% de cobro municipal sobre el precio total de las naftas.
En La Matanza, el distrito más poblado de la provincia, el porcentaje es de 1,5% por litro para las naftas y el gasoil y de 1% para el GNC. Mientras que en José C. Paz, el intendente Mario Ishii estableció un impuesto del 1% sobre el precio de los combustibles líquidos y del GNC vehicular.
Uno de los intendentes que rechaza abiertamente la tasa vial es Diego Valenzuela (PRO), a cargo de Tres de Febrero. “A mayor cantidad de impuestos, menos laburo. Argentina tiene una carga tributaria muy alta. Hay que bajar los impuestos, no subirlos, y para eso hay que bajar el gasto público”, declaró en una entrevista.
Fuera del Conurbano, un caso destacado es el del intendente de General Pueyrredón (Mar del Plata), Guillermo Montenegro (PRO), quien avanzó en febrero con el cobro de esta tasa, que representa el 1,86% del ticket final.
A nivel local, el concejal Diego Castagnaro (Cambia Escobar) presentó en enero un proyecto de comunicación para solicitar al Departamento Ejecutivo que se abstenga de cobrar la tasa. El edil radical remarcó la necesidad de “poner freno a la voracidad de los fiscos provinciales y municipales que, ávidos de recursos, tienden a denominar ‘tasa’ a cualquier tributo, sin importar el sujeto que las paga ni el concepto por el cual se tributa”.
El expediente que impulsó Castagnaro lleva el número 18.026 y todavía no fue tratado en sesión. Por ahora, se encuentra en comisiones a la espera de un dictamen.
