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Una réplica del característico arco de la ciudad, que había sido retirado en 1998, fue repuesto a un costado de la ruta 25, junto a dos estatuas, al cumplirse el 50º aniversario de la entidad. Los festejos y homenajes continuaron en su sede.
Con una serie de emotivas actividades, el Club de Leones de Escobar celebró este domingo el 50°aniversario de su fundación.
Los festejos por las bodas de oro de la organización de servicio humanitario local comenzaron cerca del mediodía, cuando las autoridades leoninas y el intendente Ariel Sujarchuk realizaron el descubrimiento de dos estatuas de leones y un colorido pórtico en la entrada a la ciudad cabecera, sobre la ruta 25 y a metros del puente de Panamericana.
Esta acción conjunta se trató de una restitución histórica, ya que en 1998 la gestión municipal encabezada por el entonces intendente Luis Abelardo Patti había quitado el característico arco de bienvenida al remodelarse el ingresó a Belén de Escobar.
Más tarde, la comitiva se trasladó hasta la sede de Víctor Hugo 44, donde se realizó un almuerzo que tuvo dos condimentos esenciales: emoción y reconocimiento.
Ante un gran marco de asistentes, primero se descubrió una placa alusiva entregada por el Municipio y luego se tomó juramento a cinco nuevos socios, entre quienes se encontraba la esposa del jefe comunal, Laura Russo, quien compartió la mesa principal junto al presidente del club anfitrión, Edgardo Pacentrilli, y el gobernador del Distrito 5, Osvaldo Valensizi.
Seguidamente, llegó el momento más emotivo de la jornada con la entrega de distinciones a dos de los socios fundadores del club: Tetsuya Hirose y Héctor “Bebé” Álvarez. “Ustedes no dejaron huella, ustedes dejaron un surco señores, porque el trabajo que han hecho con esta institución representativa en todo el distrito y la Argentina fue magnífico”, expresó Pacentrilli, quien se mostró “orgulloso de estar acá en este momento”.
Además, los ex presidentes de la señera institución fueron distinguidos con pines, al igual que Sujarchuk, a quien le agradecieron su apoyo y la donación del pórtico que cobija a las flamantes estatuas leoninas. “Dijo que nos iba a ayudar y lo hizo. Y quiero destacar que la presidenta de Argentina -Graciela Raquel Rotman-, que no pudo asistir por problemas personales, nos ha dicho que es una de las obras más importantes en ese estilo del país y que va estar puesta en las páginas internacionales del Club de Leones”, manifestó Pacentrilli, que desde agosto pasado está a cargo de la institución.
El ambiente de camaradería y regocijo que caracterizó a la jornada estuvo acompañado por una exposición de cuadros, la proyección de un audiovisual y un Museo del Club, que con fotos, banderines, placas y otros recuerdos resumió los cincuenta años de historia de la entidad de bien público escobarense, que ahora cuenta con una membresía de 34 socios.
Por último, los leones coronaron la celebración levantando las copas y brindando por poder seguir haciendo honor a su leitmotiv: «Nosotros servimos».
