Por mayoría, el Concejo dejó en comisión un proyecto para prohibir la pirotecnia

Por tercer año consecutivo y en votación dividida, el Concejo Deliberante dejó sin tratamiento este miércoles un proyecto de ordenanza para prohibir la venta y el uso de artefactos pirotécnicos en el partido de Escobar. Los bloques del oficialismo y del Frente Renovador coincidieron en que el expediente continúe en comisión para “un debate más profundo”.

El principal fundamento para no sancionar la iniciativa, pese al airado reclamo de un grupo de vecinos que se acercó a presenciar la sesión, es que no está claro si los concejos deliberantes puedan legislar sobre esta materia, que incluso a nivel provincial está pendiente de definición.

“Este expediente no tuvo ningún tipo de desarrollo, al punto que no fue al área de Discapacidad y de Zoonosis para que pudiéramos contar con un informe de los perjuicios concretos. Y tampoco contamos con un informe técnico-legal por los perjuicios que nos podría llegar a ocasionar esta ordenanza”, expresó el concejal Nicolás Serruya, erigido en vocero del bloque que responde al intendente Ariel Sujarchuk.

El edil maschwitzense aludía a la ley nacional 20.429, del año 1979, que “estipula como legal el comercio y el acopio de pirotecnia bajo ciertas circunstancias”. Y también a una carta documento enviada por la Cámara Argentina de Empresas de Fuegos Artificiales (CAEFA) al Concejo Deliberante.

Sucede que, a través de un fallo dictado el 19 de septiembre pasado, la Suprema Corte de Justicia de la provincia de Buenos Aires estableció la inconstitucionalidad de la ordenanza 220/2015 de General Alvarado, que prohibía la venta de pirotecnia en ese distrito.

Así, los productores del sector comenzaron a notificar a todos los municipios que se rigen bajo este tipo de ordenanzas, como Necochea, San Pedro, Ramallo, Olavarría y Chivilcoy, y a los que trabajan en normativas similares, tal es el caso de Escobar.

“Tenemos que buscar la forma en que la provincia impulse un proyecto que reforme esta cuestión y que no sea un distrito el que tenga que reglamentar sobre algo que tiene un vacío legal. Es un tema muy serio, que hay que elaborarlo, estudiarlo y discutirlo”, argumentó Serruya.

Al respecto, el año pasado la Cámara de Senadores bonaerense le dio media sanción a un proyecto de ley que después no tuvo tratamiento en Diputados. También en 2017, el Concejo Deliberante convocó a tres jornadas de audiencias públicas sobre este tema, pero no llegó a ninguna conclusión.

El proyecto de ordenanza original había sido presentado por vecinos y ONG’s a fines de 2016. Después, el bloque de Cambiemos introdujo algunas modificaciones a fin de explicitar que la prohibición rija sobre “la fabricación, tenencia, guarda, manipulación, transporte no autorizado, venta ambulante y/o cualquier otro tipo de comercialización irregular en la vía pública”.

“Nuestra función es legislar ante el pedido de la sociedad, no de una empresa. Pero acá tampoco se está prohibiendo todo para perjudicar a las empresas. Quedan ítems que los comerciantes van a poder seguir vendiendo”, aclaró la concejal macrista Carina Chmit.

Las excepciones estarían dadas para las tradicionales “estrellitas, bengalas y fosforitos”, entre otros productos que no generan sonidos peligrosos para la salud humana y animal y solamente producen efectos lumínicos.

Como el bloque del Frente Renovador se acopló a la posición del oficialismo, la votación terminó 14 a 9 y el expediente continuará en el seno de las comisiones, donde a esta altura no se espera que surja una definición.

Representantes de asociaciones de ayuda para personas con autismo y de sociedades protectoras de animales se retiraron indignados del recinto y lanzaron fuertes epítetos contra los concejales oficialistas y del massismo.