Por 42 votos a 1, el Concejo aprobó un aumento de hasta 60% en las tasas

Por lo normal, las asambleas de concejales y mayores contribuyentes suelen durar un par de horas, no menos. Pero este jueves a la noche cuarenta minutos fueron suficientes para que el oficialismo y la oposición sancionen las ordenanzas Fiscal y Tributaria de 2020, que prevén un aumento generalizado de 45% en las tasas municipales en el primer trimestre y autorizan al Ejecutivo a aplicar una cláusula gatillo de hasta 15% si la inflación se dispara.

Como El Día de Escobar anticipó la semana pasada (ver nota acá), el régimen impositivo diseñado por la Secretaría de Ingresos Públicos del Municipio contempla un incremento de 20% a partir de enero y otro de 25% desde marzo, que involucra a la mayoría de los tasas, derechos y contribuciones que percibe la Comuna.

Adicionalmente, ante un hipotético escenario de una inflación similar a la de este año, del orden del 55%, el Ejecutivo quedó autorizado por los concejales a aplicar una cláusula gatillo de hasta 15 puntos a partir del segundo semestre de 2020.

«Le pongo todas mis expectativas al presidente entrante Alberto Fernández y no creo que para marzo la inflación llegue al 45%», expresó la concejal macrista Carina Chmit, quien consideró desmedida la pretensión del intendente Ariel Sujarchuk con esta iniciativa. Además, cuestionó incrementos mucho más fuertes en otras gabelas.

Puntualmente, Chmit refutó el aumento del canon por el uso de instalaciones y servicios municipales. Por ejemplo, advirtió que la temporada de pileta pasará de $310 a $1.500; la entrada al CELI de $35 a $150 y al Jardín Japonés de $10 a $100, mientras que las cremaciones subirán entre 238% y 458% y la tasa de mantenimiento vial, que es de $0,31 por litro de combustible, pasará a una alícuota del 1% de su precio.

También rechazó enfáticamente el arancelamiento de las guarderías municipales. «Siempre fueron gratuitas y ahora quieren cobrar una matrícula de $2.000 por inscripción más una cuota de $2.000 mensuales», señaló al argumentar su voto, él único en disidencia en los artículos más controvertidos.

De inmediato llegó la respuesta de la jefa de bloque del Frente de Todos, Patricia de la Cruz: «Esta es una gestión que administró los recursos con responsabilidad y transparencia. Y que se destacó por la cantidad y calidad de las obras y la ampliación y el mejor funcionamiento de los servicios», expuso, en una alocución más política que técnica.

Desde la bancada del Frente Renovador también pidió la palabra el concejal Luis Carranza, que acusó Chmit de querer «alarmar» con información inexacta y sin presentar propuestas alternativas. Además, le espetó que «el presidente Macri hizo volar el país en mil pedazos con una inflación del 55%, mientras que en Escobar el aumento de tasas de este año fue de 40%».

El silencio de la bancada de Juntos por el Cambio, a la que Chmit no pertenece porque fue expulsada en 2018 (ver nota acá), no pasó inadvertido y dio lugar a sugestivas interpretaciones. Ni su presidente, Esteban Colley, ni ningún otro miembro de ese espacio amagó siquiera con intervenir en el debate, aunque sea para contestarle a Carranza por sus críticas al presidente Macri. Lo mismo que el concejal Diego Castagnaro, que recientemente hizo rancho aparte con su monobloque amarillo de Acción Comunal.

Sin más, el trámite parlamentario que se había iniciado a las 20.15 concluyó a las 20.55 con apenas tres alocuciones y un resultado general de 42 a 1 en las votaciones. Un récord inquietante.

Por Ciro D. Yacuzzi