La Corte Suprema de Justicia dejó firme el procesamiento con prisión preventiva del ex comisario Luis Patti, detenido por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar.
El máximo tribunal declaró “inadmisible” un recurso de queja presentado por la defensa del también ex intendente de Escobar, según el fallo al que accedió Télam.
De esta manera, Patti será sometido a juicio oral y público por el secuestro y tortura de seis personas y un asesinato cuando revestía en la comisaría 1ra de este distrito.
Por esta causa, que ya fue elevada a juicio oral, está detenido en el penal de Marcos Paz desde noviembre de 2007. El juez federal de San Martín Alberto Suárez Araujo le dictó prisión preventiva, en un fallo confirmado por la Cámara Federal de ese partido y luego por Casación, la máxima autoridad penal judicial del país.
Contra esta última decisión Patti fue en queja a la Corte, un recurso rechazado este martes 6, con lo cual se agotó la última chance que tenía para evitar sentarse en el banquillo de los acusados en un futuro juicio oral.
La decisión fue tomada por la totalidad de los integrantes del máximo tribunal contra el procesado por “privación ilegal de la libertad doblemente agravada, imposición de tormentos y allanamientos ilegales”.
Patti irá a juicio junto a su ex jefe Eduardo Espósito, el dictador Reynaldo Benito Bignone y el represor Santiago Omar Riveros.
El ex comisario está procesado por el secuestro del ex diputado Diego Muñiz Barreto y su colaborador Juan Fernández, además de la desaparición de los hermanos Luis y Guillermo D’Amico, Carlos Souto y la detención ilegal de Osvaldo Ariosti.
También fue procesado por el asesinato del militante justicialista Gastón Goncalvez, en hechos ocurridos todos desde marzo de 1976 a febrero de 1977, en el ámbito de la represión ilegal que estaba bajo la órbita del Primer Cuerpo del Ejército.
Muniz Barreto y Fernández fueron secuestrados en la ciudad bonaerense de Ramallo y terminaron en el centro clandestino de detención en Campo de Mayo. El 6 de marzo de 1977 el ex diputado apareció asesinado en Entre Ríos, dentro de su automóvil, mientras que su secretario sobrevivió y declaró sobre lo ocurrido.
Goncalvez y Souto fueron secuestrados en 1976 y llevados a la comisaría de Escobar, de la cual Patti era oficial subinspector, para ser torturados y están desaparecidos.