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Nueva misión. Donadío, recién asumido en Garín, junto al jefe distrital y a la secretaria de Seguridad.
A consecuencia del asesinato del joven Roberto Colombo, el comisario Walter Manrique fue inmediatamente removido y ahora está cumpliendo funciones en la Jefatura Departamental de Zárate-Campana.
Entre la conmoción social y la presión política que generó el asesinato ocurrido el domingo a la madrugada en el barrio Parque Norte, el comisario Walter Manrique salió despedido por los aires y ahora Garín tiene un nuevo jefe policial.
La seccional de la calle Perna quedó a cargo del comisario Eduardo Donadío, quien desde febrero de 2016 estaba al mando de la comisaría de Maquinista Savio. Allí lo suplantó el comisario Carlos Ibañez, que ya venía desempeñándose como segundo jefe.
La suerte de Manrique estaba echada a partir del momento en que desde el Municipio llamaron al Ministerio de Seguridad de la provincia para pedir su cabeza, tal como se informó el mismo domingo a la tarde en un comunicado.
No se sabe si el asesinato del joven Roberto Colombo -abatido de tres disparos en un intento de robo- acabó con su menguado crédito o si fue una medida efectista para aplacar la conmoción social. Lo cierto es que a Manrique lo corrieron del centro de la escena y lo trasladaron a la Jefatura Departamental de Zárate-Campana, a la espera de que pase la tormenta para asignarle un nuevo destino.
A partir del lunes a la mañana, Donadío se hizo cargo de la comisaría de Garín, tras haber estado casi dos años y medio al frente de la de Maquinista Savio. Allí quedó al frente el comisario Carlos Ibañez, que ya se venía desempeñando en el rol de segundo jefe.
