El líder del PRO dialogó con vecinos y habló sobre sus aspiraciones presidenciales: “No tenemos que volver a confiar en los mismos de los últimos 30 años”, disparó.
Con la intención de instalarse como precandidato presidencial de cara a los comicios de 2015, Mauricio Macri se encuentra realizando una recorrida por distintos municipios de la provincia de Buenos Aires que este martes a la tarde lo trajo a Belén de Escobar, donde dialogó con algunos vecinos acompañado por el referente local del PRO, el concejal Miguel Jobe.
“Seguimos caminando toda la provincia y el país, llegando a desconfiar de los mismos nombres que han gobernado la Argentina los últimos treinta años, que nos prometieron de todo y han cumplido muy poco”, expresó el jefe de gobierno porteño en una informal rueda de prensa en la esquina de Tapia de Cruz y Asborno.
Macri arribó a la ciudad alrededor de las 17. Visitó un tradicional vivero de la calle Inmigrantes, después se trasladó hasta el barrio San Luis y finalmente pasó por el centro de Escobar, donde el tiempo solo le alcanzó para entrar a saludar a una inmobiliaria. Estaba previsto que camine por la avenida principal hasta la calle Colón, pero ya tenía que irse.
Respecto a sus conversaciones con los vecinos, señaló que la inseguridad es la principal preocupación de todos: “Es dramático cómo se está viviendo en el Gran Buenos Aires, con mucha sensación de abandono y preocupación en las familias, que sienten que el Estado se ha olvidado de ellos. Ha faltado una política integral de seguridad en la provincia y en el país”.
Además, expresó: “No tenemos que volver a confiar en los mismos, necesitamos gobiernos que se acuerden de la gente, que tengan claro que todo pasa por hacer obras que le transformen la vida a la gente”.
En otro orden, el líder del PRO cargó contra el diputado nacional massista Darío Giustozzi, quien acusó a Macri de aliarse al kirchnerismo con la intención de debilitar al Frente Renovador. “Me causa mucha gracia que diga eso, porque él estuvo diez años con el kirchnerismo y ahora supone que yo soy amigo del kirchnerismo. La gente sabe cuál es la propuesta del cambio, quiénes realmente creemos que se puede hacer política de otra manera y lo venimos haciendo en la Ciudad”, afirmó el alcalde porteño.
No obstante, reconoció que la una mejoría en la relación con la presidenta Cristina Fernández de Kichner. De la misma manera, también se refirió al gobernador Daniel Scioli: “Lo conozco hace treinta años y tengo una amistad con él, pero no significa que pensemos igual. Creo que la calidad de gestión a nivel nacional y provincial no ha sido buena, independientemente de que tenga un excelente diálogo con él y espero seguir teniéndolo”.
Por otra parte, sostuvo su apertura a dialogar con representantes de todas las fuerzas políticas, aunque se negó a hablar de acuerdos electorales. “Nosotros queremos demostrarle a la gente que un grupo de personas que no ha gobernado en los últimos treinta años puede cambiar la historia. Lo que yo hice en Boca y en la Ciudad lo hice con un equipo. Entonces habrá que armar un equipo más grande, el mejor de los últimos 50 años, con lo mejor de cada uno de los lugares del país”.
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