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El presidente de la Cámara de Agencias de Remises, Horacio Sánchez, se mostró molesto con los concejales.
El presidente de la Cámara de Agencias de Remises del partido de Escobar (CARE), Horacio Sánchez, expresó este viernes su malestar por una resolución sancionada la semana pasada por el Concejo Deliberante en la que se exige que las remiserías exhiban en sus locales y en el interior de sus coches el cuadro tarifario vigente, como lo estipula una ordenanza del año 2008 que reglamenta la actividad de autos al instante.
“Nos molestó la nota que recibimos. Podrían habernos llamado para hablar, siempre tenemos buena predisposición para escuchar y ver qué podemos solucionar y hacer las cosas lo mejor posible”, manifestó Sánchez en declaraciones a EL DIA de Escobar. Y agregó: “Me parece que piensan que somos el enemigo de Escobar, porque siempre nos atacan a nosotros”.
En relación al pedido concreto del Legislativo de transparentar las tarifas publicándolas en lugares visibles para los pasajeros, Sánchez señaló: “Lo único que se puede llegar a exhibir en un coche o un local es el valor del viaje mínimo, del kilómetro y de la espera. Nosotros no trabajamos con viajes tarifados. Se pueden dar estimativos, aproximados, porque depende de la ubicación de cada agencia. Además, la tarifa es libre, cada uno la maneja a su criterio”, afirmó.
La resolución sancionada por los concejales se apoyó en el argumento de que existen numerosas quejas de usuarios de ese servicio por cobros dispares, incluso de una misma agencia por un mismo viaje. “Si el cliente no hace el reclamo, yo no tengo forma de saberlo”, explicó Sánchez, aunque reconoció que pueden existir “avivadas de algún chofer, que cobra dos pesos de más y se los guarda en el bolsillo”.
“Nunca buscamos conflicto, si hay que hacerlo, lo hacemos. Pero nos gustaría que las cosas sean parejas para todos por igual”, añadió, a al vez que anticipó que la Cámara que preside analizará el tema la semana próxima. Además, dejó entrever la posibilidad de un aumento tarifario en virtud del incremento de los costos por la devaluación del peso y la suba de los combustibles. “Con un mínimo de 25 ó 27 pesos ya nos quedamos cortos”, concluyó el dirigente de los remises.
