Tras una larga jornada de protestas que incluyó un corte momentáneo de la autopista Panamericana, en Ingeniero Maschwitz, los choferes de la línea 60 de colectivos decidieron volver a la actividad a partir de la hora cero de este viernes 13, aunque el futuro del conflicto dependerá de los resultados de una nueva reunión en el Ministerio de Trabajo.
Por la tarde, los representantes de los trabajadores habían dialogado con funcionarios del Ministerio de Trabajo, quienes tomaron nota de sus reclamos y se comprometieron a trasladarlos a la empresa, en otra reunión que fue pautada para este viernes a la mañana.
Desde temprano, un paro de actividades dejó sin colectivos a más de 300.000 usuarios que utilizan a diario la línea 60, la más popular de la Argentina.
Los choferes iniciaron la medida para repudiar el ataque a “tres compañeros” que en la víspera quisieron solidarizarse con el chofer de una empresa del grupo MOTSA que había sido despedido, relató el gremialista Néstor Marcolín. Según denuncian, “una patota” bajó de un micro y comenzó a agredir a los trabajadores sin mediar palabra.
“Luego la asamblea decidió que incluyamos entre nuestros pedidos la reincorporación de estos cuatro compañeros que fueron despedidos”, explicó el sindicalista.
Los trabajadores se reunieron esta noche en las cabeceras de Constitución y e Ingeniero Maschwitz, donde definieron que volverán a la actividad, aunque aclararon que el conflicto continúa latente.