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Valentía. Ante la demora del equipo de rescate, el joven se metió al agua y sacó al infortunado perro.
Se llama Juan Ignacio Kabur, es guardavidas y trabaja en Temaikèn. El hecho ocurrió en Río Gallegos, donde estaba de vacaciones. El video de su acto de arrojo se hizo viral en las redes.
Algunos héroes no llevan capa, antifaz, ni espada. Ese es el caso de Juan Ignacio Kabur, un vecino escobarense que se sumergió en una laguna congelada, en Santa Cruz, para salvar a un perro que se estaba ahogando. El hecho se volvió viral y fue noticia en varios portales del sur del país.
El agua helada y las bajas temperaturas de Río Gallegos no fueron un impedimento para este valiente joven, que es guardavidas y trabaja entrenando animales patagónicos en el bioparque Temaikèn.
De visita en la capital santacruceña, donde vive uno de sus primos, Kabur salió a caminar por los alrededores de la laguna Ortiz -congelada por el frío- y observó a un perro atrapado debajo de la capa de hielo y en el agua helada.
Contra todos los consejos de los lugareños, que le recomendaban esperar a que llegue personal especializado, el joven se zambulló. Con la tonfa de un policía y una soga se abrió paso a través de las gruesas capas de agua congelada y, finalmente, rompió el hielo con las manos y rescató al indefenso animal ante la presencia de varios vecinos tan curiosos como preocupados.
“Uno de los oficiales me dijo que también era del cuerpo de rescate y me sugirió esperar que vengan los encargados de ese tipo de salvatajes. Pasaron tres minutos, que para mí fueron eternos, y el vecino que los llamó los convenció de que me meta”, contó el escobarense al portal La Opinión Austral.
“Cuando salí de la laguna y me bajó la adrenalina no sentía los pies, que los tenía pesados, ni las manos, que las tenía con sangre”, agregó el joven, que en ese momento había sacado a pasear a su propio perro.
En el estremecedor video se lo puede ver, con la camiseta de River, adentrándose en las frías aguas hasta conseguir el objetivo.
Sin embargo, la conclusión de la historia no fue la mejor. El perro sufrió un shock hipotérmico por haber estado expuesto y falleció minutos después, a pesar del esfuerzo de Kabur y de los veterinarios que lo atendieron.
Un final triste para el loable acto de arrojo del joven escobarense, ocurrido el pasado viernes, cuyas imágenes atravesaron todas las redes sociales y se volvió viral, tanto en Buenos Aires como en Santa Cruz.
