Bomberos voluntarios trabajaron durante 16 horas para controlar el fuego, que llegó a desarrollar un frente de cuatro kilómetros. Fue a la altura del canal El Correntino. Hace un año hubo dos incendios similares en la misma zona.
Una vez más, el Delta del Paraná se vio envuelto en llamas: este domingo se produjo un impresionante incendio forestal de más de cuatro kilómetros de extensión, a la altura del canal El Correntino, en el partido de Escobar, donde varias dotaciones de bomberos voluntarios trabajaron arduamente para poder controlar la situación.
El fuego comenzó a la mañana y se prolongó hasta las últimas horas de la noche, en una zona cercana a la terminal de regasificación instalada a la altura del kilómetro 70 de la hidrovía.
Dos dotaciones del cuartel de bomberos voluntarios de Belén de Escobar y una del destacamento de Matheu encabezaron el operativo, junto a personal de Defensa Civil y efectivos de la Policía Isleña.
Este incendio forestal fue similar a los que ocurrieron en agosto (ver nota acá) y septiembre (ver nota acá) del año pasado. En este caso el incidente pudo controlarse en menos tiempo, ya que se dio en un lugar más accesible, aunque la cercanía con el puerto regasificador volvió a encender las alarmas.
Para los bomberos el trabajo fue extenso, ya que estuvieron más de dieciséis horas, y también muy arduo, a punto tal que tres efectivos involucrados en el operativo sufrieron diversas lesiones, según informaron las autoridades.
Además, las características inhóspitas del terreno y la extensión del siniestro, que llegó a desarrollar un frente de cuatro mil metros, exigieron un despliegue desgastante y agotador por parte de los servidores públicos para evitar que el fuego se propague y dejar la situación bajo control.
Hasta el momento no se pudo determinar el origen de este nuevo incendio, que causó serios daños a la vegetación del área afectada.
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