Colocaron un cartel que indica que allí funcionó un centro clandestino de detención en la dictadura.
De ahora en más, quienes pasen por la vereda de la comisaría 1ra de Escobar no podrán ignorar que allí funcionó un centro clandestino de detención durante la última dictadura militar. En un acto organizado por la Red Federal de Sitios de Memoria, este miércoles a la tarde se colocó una placa que indica el uso dado a esa dependencia en el marco del sistema represivo ilegal.
El acto, que interrumpió el tránsito en la avenida Tapia de Cruz al 1000, contó el apoyo de parte de la militancia kirchnerista y de derechos humanos del partido y la región: el piberío de Peronismo Militante de Escobar y de la JP bonaerense fueron los que más se hicieron notar, con banderas y bombos. También estuvieron representantes de la Comisión por la Memoria de Escobar y de la Comisión por la Memoria, la Verdad y la Justicia Zona Norte, entre otras agrupaciones, partidos y organizaciones que adhirieron al evento.
Hacia el costado izquierdo de la avenida, formando un semicírculo, ocuparon las sillas familiares de desaparecidos escobarenses y caras conocidas como las del actor “Paco” Fernández de Rosa y el albañil Luis Gerez. Más atrás, parados casi en la vereda de enfrente, se ubicaron algunos concejales oficialistas: Javier Pérez, Daniel Tossio, Mónica Díaz y Damián Macías. Tras el descubrimiento del cartel, comenzaron las alocuciones.
“Aunque esto parezca nada, hoy es un montón. Significa que como sociedad hemos crecido y madurado como ninguna otra en el mundo”, señaló Manuel Gonçalves, hijo del militante peronista desaparecido Gastón Gonçalves.
“Para mí Escobar no es una ciudad más. Es verdad que acá encontré quizás a las mejores personas que conocí en mi vida, que eran los compañeros de mi papá, que padecieron la impunidad de Escobar en su máxima expresión, porque uno de los responsables de lo peor que les pasó en la vida a cada uno de ellos, que es el secuestro, la tortura y la desaparición de sus compañeros, fue intendente de este lugar”, expresó el joven.
“Durante mucho tiempo estuve enojado con la sociedad de Escobar. No podía entender cómo habían elegido a Patti para intendente. Pero también sé que lleva muchos años cambiar lo que la dictadura ha puesto en la cabeza de muchas personas”.
En esa línea, Gonçalves cuestionó la procedencia política de las principales autoridades municipales de Escobar, otrora pattistas. “Mientras quienes fueron sus aliados se mantengan en el poder, todavía no hemos ganado”, expresó. Minutos después, otro orador coincidió con sus palabras y enfatizó ese aspecto (ver “Son hijos directos de Patti”). Fue Federico Wenner, hermano del periodista local desaparecido Tilo Wenner.
Otra voz que se escuchó en el acto fue la de la coordinadora ejecutiva del Archivo Nacional de la Memoria, Judith Said. “Estamos homenajeando a todos los compañeros que pasaron por aquí. Y quiero dejar en claro que esto fue con el total consentimiento de las fuerzas policiales que hoy cumplen funciones en este lugar”, destacó. A unos metros suyo, la presencia del comisario Carlos Vara, jefe de la seccional, evidenciaba su afirmación.
“Son hijos directos de Patti”
Por su emotividad, por las consecuencias que a cada uno le dejó la dictadura y por su contenido, las alocuciones de Manuel Gonçalves y Federico Wenner marcaron los puntos más altos de la tarde. Ambos coincidieron en dedicar parte de sus mensajes a analizar crítica y descarnadamente la situación política local.
“A Escobar todavía le falta mucho políticamente. Le falta hablar de verdad de lo que pasó acá. Hasta que institucionalmente Escobar no hable del terrorismo de Estado y no mencione a Luis Patti como uno de los responsables, todavía estamos en deuda con la verdadera revisión de la historia. Mientras quienes fueron sus aliados se mantengan en el poder, todavía no hemos ganado”, señaló Gonçalves.
Y agregó: “Así como hay gente que utiliza mucho la política nacional y los derechos humanos a nivel territorial, como pasa en Escobar y en muchos lugares, también hay mucha gente que se merece tener un lugar preponderante en la lucha de la memoria, la verdad y la justicia”.
Por su parte, Wenner sostuvo que “los que están gobernando Escobar son hijos directos del que está preso en Ezeiza”. En ese orden, cuestionó que “ninguna autoridad municipal se hizo presente durante los seis meses que duró el juicio a Patti, pero ahora se dan el lujo de invitar a Estela de Carlotto y a Hebe de Bonafini para travestirse en la política”.
Más adelante, insistió en “formar el Partido para la Victoria en Escobar y no ser cooptados por esta banda cuyo jefe está preso en Ezeiza”.
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