El bloque de diputados nacionales del Frente para la Victoria impuso su mayoría en la Cámara para aprobar este miércoles el pedido de licencia sin goce de dieta por un año presentado por Sandro Guzmán, que la oposición rechazó en pleno con fuertes críticas al intendente escobarense.
En noviembre pasado Guzmán había solicitado licencia hasta el 28 de febrero de 2015, ya que decidió reasumir en la Intendencia. Al vencer el plazo, pidió renovarla por doce meses, pero esta nueva solicitud no había sido autorizada hasta ahora y su tratamiento levantó polémica en el recinto, ya que el jefe comunal ingresó al cuerpo por el Frente Renovador y acaba de regresar a las filas del kirchnerismo.
“Si ha decidido participar del Frente para la Victoria, tiene que venir y sentarse allí. De lo contrario tiene que dejar asumir al que le sigue en la lista” (de candidatos a diputados nacionales del Frente Renovador por la provincia de Buenos Aires, Horacio Alonso), embistió Graciela Camaño.
“Es un delito: no puede ser intendente”, insistió la diputada massista al señalar que un funcionario público no puede ser miembro del Poder Legislativo y del Poder Ejecutivo a la vez. Y agregó: “A diferencia de algunos otros que sostienen que las bancas le pertenecen al partido, creemos que la banca le pertenece al pueblo. Ahora, cuando el diputado que solicita la licencia emplea una maniobra para obstaculizar la posibilidad de que el bloque al que pertenece pueda contar con la banca, allí sí podemos levantar la voz”.
Fernando Sánchez, de la Coalición Cívica, recordó que el año pasado su jefa, Elisa Carrió, había avanzado junto al kirchnerista Carlos Kunkel con un proyecto para impedir que los diputados pidan licencia para volver a las intendencias. “Guzmán tiene derecho a irse de una fuerza política a otra y no me cabe saber sus motivaciones. Pero no puede tener ejercicio alternado de dos cargos”, denunció.
María Teresa García, secretaria parlamentaria del bloque oficialista, le recalcó a Sánchez que el proyecto de Kunkel y Carrió nunca se aprobó y que su bloque siempre había apoyado licencias. “No consta en el bloque ni en la Cámara ninguna nota del diputado (Guzmán) que diga que quiere pertenecer a otra banca a la que pertenece”, ironizó.
Unión PRO, la UCR y el FAP también rechazaron la licencia de Guzmán. “Esto vuelve a darnos desprestigio como diputados”, disparó Felipe Solá, a la vez que cuestionó la “ética política” de los legisladores que avalaron el pedido del escobarense para hacerle perder un escaño al Frente Renovador.
Al cruce del ex gobernador salió Carlos “Cuto” Moreno. “En el conflicto de la 125 este bloque perdió 16 diputados y nosotros no le pedimos la renuncia a ninguno. Entonces, los que cambiaron de camiseta, ¿qué nos quieren dar clase?”, le respondió a Solá, que en 2007 encabezó la lista de diputados nacionales del FPV y se pasó a la oposición por el conflicto con las entidades agropecuarias.
Tras el arduo debate, el Frente para la Victoria habilitó la ausencia sin goce de sueldo de Guzmán hasta el año próximo y -al menos hasta entonces- le quitó una banca al massismo. La votación arrojó 125 legisladores a favor, 65 en contra y 2 abstenciones.