Eran casi las tres de la tarde y el concejal Luis Carranza tenía la palabra para argumentar la posición favorable del bloque justicialista a la rendición de cuentas municipales de 2009. Pero su alocución se vio interrumpida, abruptamente, cuando el dueño de una radio de Maquinista Savio, Orlando “Tony” Guerra, se interpuso entre las bancas y el estrado para protestar a viva voz por una sanción que los legisladores acababan de aplicarle por “evasión tributaria”. Su escandalosa conducta obligó a que el cuerpo tomara un cuarto intermedio, mientras la policía entraba en acción para reconstituir el orden en la sala de sesiones.
Desde temprano se sabía, o se daba por posible, que no sería una jornada tranquila en el Concejo Deliberante. El recinto, generalmente despoblado en días de sesión, albergaba este miércoles a decenas de asesores y empleados de los bloques, mientras que en el corralito destinado al público se ubicaba una veintena de vecinos de Savio, todos ellos expectantes del expediente que promovía sanciones contra FM Bárbara y su dueño por haber incurrido en gruesas irregularidades durante la organización de un espectáculo público.
A la hora 14, los veinte concejales se sentaron en sus bancas. La cuarta sesión ordinaria duró un puñado de minutos, sin discusión alguna. No obstante, el proyecto impulsado por el concejal oficialista José María Rognone contra Guerra y su emisora fue aprobado pero solo con el voto peronista, ya que los bloques minoritarios prefierieron no involucrarse en un conflicto que entendieron ajeno, dada la cercanía del locutor tropical con el poder político local.
Con la aprobación de la iniciativa presentada por Rognone, el Concejo Deliberante le aplicó a Guerra una sanción de tres años de inhabilitación para organizar espectáculos. Fue a consecuencia de un recital de cumbia que realizó frente al polideportivo de Savio para el que dispuso arbitrariamente cortar una calle y cobrar entrada al público, a pesar de una expresa prohibición que el Municipio le había notificado por escrito.
Tras sentenciar el caso Guerra, los concejales pasaron a una sesión especial para tratar la rendición de cuentas de la Comuna correspondiente al ejercicio 2009. Ahí, mientras Carranza daba los fundamentos del bloque que preside, a Guerra se le salió la cadena: desde el sector que compartía junto a representantes de la prensa local, apuró unos pasos hasta pararse de espaldas al estrado de la presidencia y, de cara a las bancas, acusar a Rognone de un supuesto pedido de coima.
Desencajado, el propietario de FM Bárbara no paraba de lanzar acusaciones y desobedecer toda apelación a la cordura. Entonces, el presidente del HCD, Elio Miranda, que ya había dispuesto un cuarto intermedio, solicitó al personal policial que estaba de civil que desaloje al alborotador, que recién ahí frenó su embestida y se retiró del recinto por las suyas.
Repudio en las bancas
Al reiniciarse la sesión, y antes de retomar el expediente que se trataba cuando ocurrió la interrupción, el concejal Carranza pronunció un severo repudio a la “reprochable actitud” de Guerra, a la vez que garantizó el apoyo del PJ a todas las medidas que sobre el hecho determine la presidencia, así se trate de “evaluar acciones legales”.
En la misma sintonía, el denarvaista Jesús Angioi se refirió al locutor tropical como “ese maleducado”, en tanto que aseveró que “no se puede entrar a una sala donde se están tratando temas importantísimos para el distrito a gritar y brabuconear cosas que no tienen nada que ver”.
A su turno, el concejal Rognone anticipó que iniciará “acciones legales por calumnias e injurias”. En cuanto al controvertido expediente de su autoría, lo reivindicó al afirmar que “más que una sanción, Maquinista Savio necesitaba una respuesta política, porque lo que pasó fue un atropello”.
Rendición de cuentas
Relegada a un lugar secundario de importancia por los incidentes ocurridos durante su tratamiento, la rendición de cuentas de 2009 resultó aprobada por 17 votos afirmativos, dos negativos -Angioi y Néstor Bodes (Unión Celeste y Blanco)- y la abstención de Luis Babi (ídem), otrora funcionario de la Comuna en ese año.
En su alocución, Carranza destacó que los números de 2009 demuestran un índice record de recaudación de la tasa por servicios generales ($ 30.803.716), en tanto que el déficit fue de $ 1.466.015.