Dos ladronas se agarraron a piñas con la policía en el Coto de Garín

Dos mujeres que fueron sorprendidas in fraganti cuando trataban de robar mercaderías del supermercado Coto de Garín se agarraron a trompadas con el personal policial que intentaba llevarlas a la seccional.

El hecho ocurrió este lunes 3 a la noche, minutos antes del cierre del supermercado ubicado en avenida Belgrano y Salvo, cuando dos mujeres fueron sorprendidas por personal de seguridad privada mientras guardaban mercaderías entre sus ropas y carteras.

Los agentes procedieron a apartar a las mujeres y dieron intervención a la comisaría local. Pero cuando la patrulla llegó y una mujer policía se disponía a llevar cabo el cacheo y la detención, ninguna de las dos quiso entregarse y comenzaron una fuerte y larga discusión que terminaría mal.

Seguramente si las mujeres optaban por entregarse nada hubiese pasado a mayores, teniendo en cuenta el accionar judicial en estos casos, ya que apenas si se llevaban una docena de productos de poco valor. Pero eso no pasó; al contrario, con el correr de los minutos el clima se fue poniendo más espeso.

Así, en un momento una de las “mecheras” le aplicó un golpe de puño a la policía, que le devolvió la trompada y fue entonces donde comenzó un verdadero show-papelón- en el hall central del Coto, ante la mirada atónita de los empleados y compradores.

Después de varios minutos el personal policial pudo reducir a las delincuentes, que fueron llevadas a la sede policial y quedaron detenidas bajo la carátula de “hurto en grado de tentativa” y “resistencia a la autoridad”. Ambas son mayores de edad, una vive en Belén de Escobar y otra en Benavídez.

La meca de los ladrones

Este hecho no es el primer delito que sucede en la sucursal de Coto inaugurada en abril. Por el contrario, el establecimiento cuenta con varios episodios en su breve historial, sobre todo a partir de los hurtos de motos sufridos por una buena cantidad de clientes en la playa de estacionamiento.

El Coto no sólo se convirtió en una interesante opción para hacer las compras, sino que se transformó también en una nueva “mina de oro” para los malvivientes.