Centenares de personas de todas las edades concurrieron a una panadería de la 25 de Mayo que publicó un aviso de trabajo en las redes sociales. Una imagen que denota la crisis económica, agravada por la pandemia,
Centenares de personas de todas las edades concurrieron a una panadería de la 25 de Mayo que publicó un aviso de trabajo en las redes sociales. Una imagen que denota la crisis económica, agravada por la pandemia.
La crisis económica, agravada por la pandemia de coronavirus, golpeó fuerte en los hogares de muchísimos argentinos. A pesar de que el Estado haya dispuesto ayudas económicas para una gran parte de los trabajadores y prohíba los despidos, la pérdida de empleo fue moneda corriente en este año. Sobre todo para aquellos que se ganaban la vida con un empleo en negro.
Por eso, no resulta llamativo que ante cada convocatoria laboral de algún comercio o empresa, cientos de personas acudan a postularse con la ilusión de conseguir ese trabajo.
Eso mismo pasó este lunes y martes en una panadería de la avenida 25 de Mayo, en Belén de Escobar, donde se juntó una importante cantidad de gente que llevó su currículum con la esperanza de obtener el trabajo o, al menos, ser tenido en cuenta.
Desde horas de la mañana, cientos de personas se acercaron a la conocida panadería La Italiana, en la avenida 25 de Mayo al 1000, entre Bernardo de Irigoyen y Sarmiento, que está próxima a reabrir tras haber reacondicionado sus instalaciones.
Con currículum en mano, barbijo y distancia social, la mayoría de los postulantes pudo resguardarse bajo la sombra de los árboles hasta que llegara el turno de entrar al local.
La convocatoria, que circuló días antes a través de las redes sociales, era bastante amplia. La búsqueda estaba dirigida a maestros, oficiales y peones de panadería; maestros y ayudantes factureros, maestros y ayudantes de repostería; y maestros pasteleros, entre otros.
También se solicitó personal para atención al público “con conocimiento de pastelería y panadería”, una cajera, empleados para el área de fiambrería, vendedores con conocimiento en productos de panadería y repostería y personas con conocimiento en productos veganos y vegetarianos.
En un principio, la convocatoria era entre las 10 y las 16. Sin embargo, debido a la cantidad de aspirantes que se acercaron, el horario terminó extendiéndose más de la cuenta.
Por suerte, ambos días fueron bastante agradables en cuanto a la temperatura y las personas que hicieron la fila no tuvieron que padecer las inclemencias del tiempo. Aunque, lamentablemente, no todos van a poder conseguir el puesto que buscan.
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