Docentes y alumnos escobarenses se movilizaron este miércoles para pedir justicia por el asesinato del docente Carlos Fuentealba, ocurrido hace cinco años en la provincia de Neuquén. La concentración partió pasadas las 10.30 desde la avenida 25 de Mayo, en la entrada a Belén de Escobar, siguió por la calle Rivadavia y la avenida Tapia de Cruz hasta llegar a la plaza San Martín.
“Esta no es una fecha cualquiera. Nosotros habíamos pedido un paro nacional para el día de hoy que obviamente no se ha llevado adelante. Por eso estamos realizando esta jornada de conmemoración y de reclamo de justicia por nuestro compañero, a quien llevamos en el corazón y recordamos por su lucha”, expresó el secretario general de Suteba Escobar, José Magallanes, megáfono en mano.
Al llegar a la plaza central, los docentes improvisaron una radio abierta. La primera en tomar la palabra fue la secretaria gremial de Suteba Escobar, Claudia Consiglio: “Nos manifestamos para que los vecinos sepan que un día como hoy, hace cinco años atrás, un docente de la provincia de Neuquén murió fusilado por un arma siniestra mientras se retiraba de una movilización”.
“El responsable de haber disparado está preso, pero queremos la justicia completa para los autores políticos e intelectuales que habían liberado a esa zona y permitieron que los docentes fueran reprimidos por la policía. Carlos reclamaba por las mismas cosas que nosotros, por eso sólo encontrando a los responsables podremos hacer que descanse en paz y que su lucha no haya sido en vano”, afirmó la docente.
Otra voz que se escuchó fue la del secretario adjunto de la seccional local de Suteba José Escobar: “El compañero no murió por un capricho ni por una negligencia, muere porque hubo una política para asesinarlo. El no solamente hacía la lucha sino que también trabajaba en el aula. Por eso el mejor homenaje que le podemos hacerle, aparte de haber salido a la calle a recordarlo, es tomando su ejemplo con nuestros alumnos en las aulas. Tomemos cinco minutos en las escuelas para hablar de lo que representó él en la educación argentina”.
“Carlos murió por pelear contra los planes de ajuste. En este momento, a nosotros nos están haciendo cobrar el día 11 nuestro salario. Es otra manera de castigarnos por todos los paros que estuvimos llevando adelante durante marzo por el mísero aumento que nos están dando. De esa manera el gobierno de Cristina nos quiere castigar”, aseguró Escobar.
Cinco años atrás
En el marco de una huelga del sindicato ATEN, perteneciente a la CTERA, los docentes neuquinos decidieron hacer un corte de la ruta 22 a la altura de Arroyito, el 4 de abril de 2007, como medida de protesta. Fuentealba no compartía la decisión de hacerla en ese lugar porque lo consideraba peligroso, pero accedió a la voluntad de la mayoría.
Ese día la policía provincial recibió la orden del gobernador Jorge Sobisch de impedir que los manifestantes cortaran la ruta, para garantizar el libre tránsito en la misma. Al llegar al lugar y antes de que se efectivizara el corte de ruta, los docentes fueron desalojados con balas de goma, gases lacrimógenos y un carro hidrante. Tras una conversación entre dirigentes y policías en la estación de servicio, se detuvo el accionar policial y los docentes se retiraron en grupo, a pie y en autos, hacia la ciudad de Senillosa, escoltados por camionetas policiales.
Luego, sin aviso, las patrullas se adelantaron a la caravana, encerrándola y reanudaron el uso de la fuerza. Fuentealba se encontraba en el asiento trasero de un auto Fiat 147 que se retiraba del lugar cuando un policía de nombre José Darío Poblete, integrante del Grupo Especial de Operaciones Policiales (GEOP) de la ciudad de Zapala disparó una granada de gas lacrimógeno hacia el auto, que se encontraba a unos 2 metros de distancia.
El cartucho de gas lacrimógeno atravesó el vidrio del vehículo e impactó en la nuca a Fuentealba, causándole un hundimiento de cráneo. En el hospital provincial fue sometido a dos operaciones y finalmente murió al día siguiente.