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Rey, Blanco, Guzmán y otros funcionarios se metieron al arroyo El Tajamar para ver el estado del desagüe.
Residuos de todo tipo que se fueron amontonando durante varios años terminaron por generar una obstrucción del 80% en algunos tramos del entubamiento del arroyo El Tajamar, lo cual sería el causante del lento drenaje pluvial en el centro de Belén de Escobar y sus adyacencias. La anomalía se detectó luego de la tormenta de la semana pasada, donde nuevamente se acumularon grandes cantidades de agua en las principales calles de la ciudad y en los barrios de los alrededores.
Así lo dio a conocer este lunes 10 el Municipio a través de un comunicado de prensa, donde se detalla que el cauce del arroyo “se encuentra obstruido en más de un 80% en casi toda su extensión y hasta un 100% a la altura de Las Heras y Colón”.
Las autoridades señalaron que por esta razón el entubamiento, realizado a fines de los ’90 y de suma importancia para drenar las precipitaciones en el casco céntrico y barrios aledaños, “funciona actualmente como reservorio en lugar de hacerlo como pase de caudal”.
Durante la jornada del pasado viernes 7 el intendente Sandro Guzmán y el jefe de Gabinete, Walter Blanco, junto al secretario de Inspección General, Sebastián Rey, y a otros funcionarios y un equipo de técnicos, ingresaron al túnel hidráulico para ver el estado del mismo y el comienzo de los trabajos de limpieza.
“El entubamiento se encuentra obstruido por algunos materiales que quedaron desde su construcción y que, con el paso del tiempo, de forma natural fueron arrastrados por el agua hasta dejar cerrado el cauce. Me encontré en sitios donde el entubamiento tiene 2 metros de altura y cerca de un metro y medio está obstruido con barro y restos de basura acumulados que, por falta de corriente de agua, se fueron asentando allí”, comentó el jefe comunal tras la recorrida.
Asimismo, Guzmán sostuvo que desde el Municipio se está haciendo “todo lo posible para evitar las grandes acumulaciones de agua en las calles de Belén, consecuencia de las fuertes lluvias que se vienen dando. Vamos a encarar un trabajo hidráulico fundamental para que el entubamiento de El Tajamar funcione mejor”.
En ese orden, ya se inició la desobstrucción del entubamiento que atraviesa el casco de Belén de Escobar hacia el barrio Lambertuchi. La siguiente etapa consistirá en “estudiar cada uno de los ramales para comprobar su funcionamiento y realizar, en forma paralela, la reparación de las bocas de tormenta actuales y la construcción de nuevas y más grandes bocas que faciliten el rápido drenaje del agua en casos de fuertes tormentas, como las que se vienen registrando en los últimos años”, se informó.
Las autoridades indicaron que el taponamiento se generó con residuos de la construcción del entubamiento.
