El aberrante hecho ocurrió sobre la calle Santiago del Estero, cuando la víctima iba a hacer unas compras. Está internada con pronóstico reservado. Su agresor se encuentra prófugo.
Una mujer de 88 años se debate entre la vida y la muerte luego de haber sido brutalmente golpeada por un hombre de unos 30 años que la asaltó y trató de violarla, en un aberrante hecho ocurrido en Ingeniero Maschwitz el domingo pero que recién trascendió en las últimas horas.
El episodio ocurrió al mediodía cuando la octogenaria, de nombre Paula, salía a hacer compras para luego dirigirse a la casa de una hermana.
Al llegar al 1600 de la calle Santiago del Estero, la abuela observó el sospechoso accionar de un hombre joven que cruzó de vereda en dirección hacia ella. Imaginando que algo malo podía ocurrirle, la mujer aceleró el paso, pero no pudo evitar que el sujeto la alcanzara.
“Te veo y me hacés acordar a mi abuelita, una persona a la que yo quería mucho”, le dijo el hombre, que tras arrebatarle la cartera la tiró al piso, al costado de un volquete.
Según el relato de familiares de la anciana, todo ocurrió en proximidades de una conocida maderera, en una calle no muy transitada.
Tras haberse hecho de unos pocos pesos que guardó en su bolsillo, el delincuente comenzó a destrozar las ropas de la mujer, que con sus pocas fuerzas soportó el ataque, de acuerdo a la versión difundida por el diario Crónica.
Ante la resistencia de la víctima, el marginal le aplicó trompadas y puntapiés en el cuerpo y el rostro, le robó las zapatillas y se dio a la fuga. Un señor que pasaba a metros del lugar escuchó gritos desesperados y auxilió a la abuela, que alcanzó a narrarle la pesadilla vivida.
“Debido al estado en que se encuentra la abuela no podemos afirmar si fue penetrada, aunque el depravado la manoseó, le dijo todo tipo de barbaridades y de acuerdo con el estado de la víctima no existen dudas de que trató de violarla”, comentó una fuente policial.
La víctima “tiene desgarrada la piel de la entrepierna, mordiscones en el cuello y huellas tremendas de una brutal agresión, además de padecer EPOC, sufrió hace un año una fractura de cadera”, amplió.
Los vecinos estaban analizando organizar una marcha a la comisaría de Ingeniero Maschwitz para exigir justicia.