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SR. DIRECTOR:
El pasado sábado 2, en un local alquilado por el Partido Obrero, localizado en la calle Sarmiento, entre las calles Estrada y Eugenia Tapia de Cruz, se armó una fiesta y baile organizado por la juventud militante del mismo. Todo comenzó aproximadamente a las 21 y continuaron hasta las 4 de la mañana.
La música estaba a tan alto volumen que los vecinos no pudimos descansar y se escuchaban los gritos de los militantes y las bocinas de los automóviles que conocían a esta gente. Llamamos a la Dirección de Monitoreo de la Municipalidad de Escobar y después de varias llamadas nos respondieron que al ser un local partidario no podían hacer nada.
Llamamos a la Policía, pasó por el frente del local tres veces y en ninguna oportunidad se bajaron del móvil para decirle a los militantes del Partido Obrero que bajaran la música.
Con esto y muchos otros ejemplos que puedo mencionar en otra carta, nos damos cuenta de que los vecinos de Escobar estamos completamente olvidados, desprotegidos, sin derecho, pero sí con obligaciones cuando tenemos que pagar los impuestos que evidentemente son malgastados por la gestión pública porque no tenemos seguridad, no tenemos centros de salud acordes a nuestras necesidades, no tenemos educación, ya que las escuelas están en condiciones que se pueden asociar al olvido y con ello arrastran a los chicos a esa condición, las calles cada vez más rotas, las calles de la estación y paradas de colectivos destruidas y altamente sucias por descuido del Municipio y por la falta de educación de la gente.
Las barreras que no funcionan y los vehículos tienen que hacer proezas para atravesarlas corriendo alto riesgos las familias y transeúntes. Los vehículos manejados por energúmenos que se estacionan sobre las veredas y las rompen y en los garajes de los domicilios particulares, sin ser sancionados por los inspectores de tránsito. Los semáforos no funcionan, la iluminación en las calles es insuficiente.
No hay controles en el área ambiental para prevenir la contaminación y se aprueba cualquier cosa como el buque regasificador, que es una bomba de tiempo y representa un altísimo riego potencial para la vida de todos los habitantes de Escobar, y así podría continuar mucho más y esta carta se haría interminable.
La verdad, me da indignación todas estas situaciones y me da mucha vergüenza y lástima la juventud del Partido Obrero, “ellos que proponen un cambio y un mundo mejor”, porque no respetan a nadie y se manejan con la impunidad de que nadie les puede decir nada porque son un partido político, cuando en realidad deberían ser los primeros en dar el ejemplo y respetar las reglas, las normas de convivencia, respetar al vecino.
El señor Pitrola, que vive en un barrio parque, no creo que tenga que tolerar lo mismo que sufrimos nosotros a causa de sus militantes.
La libertad de cada individuo termina cuando empieza el derecho del otro. Y como decía la señora Evita: “Donde hay una necesidad existe un derecho”.
Espero que esto último sea tomado no solo por el Partido Obrero sino también por toda la gestión del Sr. Intendente, para que respondan a las necesidades de la gente, los vecinos.
Recuerde Sr. Intendente, usted debe dar respuestas al pueblo de Escobar, porque nosotros con nuestros impuestos pagamos su sueldo y el de todos sus colaboradores y empleados. Queremos respuestas y soluciones a nuestros requerimientos y necesidades, no queremos estar a la deriva, queremos accionar de la gestión pública para resolver nuestros problemas.
Andrea Bosani (Belén de Escobar)
