La mercadería era tratada con lavandina y vino tinto, a fin de modificar las características organolépticas de las piezas y embaucar a los potenciales compradores. Tampoco contaba con cadena de frío.
Operativos de control comercial realizados en vísperas de las Pascuas por inspectores municipales arrojaron como resultado el decomiso de más de 250 kilos de pescado que eran vendidos en la vía pública sin autorización ni condiciones mínimas de salubridad.
Los responsables de los puestos de venta ambulante exhibían ejemplares «frescos» tratados previamente con lavandina y vino tinto, con el objeto de modificar las características organolépticas de las piezas y embaucar a los potenciales compradores, indicaron este viernes desde la Comuna.
«Esa actividad es ilícita y potencialmente dañina para la salud pública. Los pescados comercializados se encontraban en envases y bolsas sin un sistema de cadena de frío, vital para su correcta conservación», alertaron las autoridades.
Ante estos casos, recomendaron a la gente que compre pescados en locales o puestos habilitados a tal efecto y nunca en la vía pública, «dada la falta de medidas bromatológicas que potencialmente pudieran ocasionar intoxicaciones tras su ingesta».
Decomisaron más de 250 kilos de pescado en mal estado en puestos callejeros.
La mercadería era tratada con lavandina y vino tinto, a fin de modificar sus características y embaucar a los potenciales compradores. Tampoco contaba con cadena de frío. https://t.co/zLvFcPudW7 pic.twitter.com/hw5bZVitVB
— El Día de Escobar (@eldiadeescobar) April 22, 2019