La Provincia decidió que este año no se inscriban nuevos aspirantes y reducirá un 30% al personal de la fuerza de seguridad creada por Scioli en 2014. “La gobernadora está cometiendo un error”, advirtió.
Aunque sin subir el tono ni apelar a ataques personales, el intendente Ariel Sujarchuk expresó sus diferencias con la decisión de la gobernadora María Eugenia Vidal de empezar a desmantelar la Policía Local, que este año no tendrá nuevos inscriptos y de manera gradual reducirá un 30% sus miembros. «Está cometiendo un error», aseguró el mandatario de Escobar.
En la actualidad, la Policía Local está presente en 82 distritos de la provincia de Buenos Aires y sus intendentes venían reclamando el control de la fuerza. Sin embargo, a contrapelo de sus intereses, el gobierno provincial decidió frenar el aumento de estos uniformados, lo que abrió una nueva pelea con los alcaldes.
La orden la dio el ministro de Seguridad, Cristian Ritondo: este año dejará de haber ingresos en las distintas escuelas que los municipios montaron para capacitar a los uniformados. Desde el inicio de la gestión, Vidal y Ritondo cuestionaron la formación de esta fuerza que creó el ex gobernador Daniel Scioli en 2014 y se opusieron a darles el control a los intendentes.
Ahora, en los distritos de menos de 70 mil habitantes (son 29) se fusionarán con la Policía Comunal, mientras que en los municipios del Conurbano no sólo dejarán de sumar agentes sino que buscarán disminuir el personal en un 30%, por lo que en algunos años los uniformados que queden podrían ser fusionados con la Policía Bonaerense.
“La gobernadora comete un error y no hace una evaluación del funcionamiento en cada distrito. En Escobar conseguimos que esta institución pase de 10 detenciones mensuales a 120”, expresó el intendente Sujarchuk.
En Escobar hay 350 efectivos de la Policía Local y el plan original era que este año puedan ingresar 200 más. “Ahora, el desarrollo de la fuerza queda trunco», lamentó el jefe comunal, al tiempo que consideró que «la gobernadora debería haber charlado con los intendentes».
«Ya nos hacemos cargo de los gastos en seguridad: combustible, reparaciones de comisarías, alquileres, viandas… No nos quejamos porque queremos hacernos cargo, pero cuando invierte y se quita el proyecto, es cuando la plata se pierde”, sostuvo.
Sujarchuk no fue el único intendente crítico con esta medida. De hecho, desde el peronismo salieron en fila a cuestionar lo que entienden como un intento no tan velado de desmantelar a esta fuerza de proximidad, que tiene la particularidad de estar integrada por vecinos de cada distrito.
“Es contradictorio que la inseguridad sea el principal problema de los bonaerenses y tomen la decisión de no sumar más agentes de la Policía Local. También es contradictorio que esté bien la descentralización de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires y que no quieran discutir que la Policía Local pase a depender de los municipios”, reclamó el intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, uno de los tantos que salió al cruce de Vidal.