Se trata de delineadores flexibles y tachas reflectivas, que contribuyen a regular la circulación vehicular. Son accesorios usuales en otros distritos, pero en Escobar se ven por primera vez en el marco de una iniciativa municipal financiada por el Banco Mundial.
Delineadores. Están hechos en poliuretano flexible, por lo que pueden resistir colisiones y aplastamientos.
Se trata de delineadores flexibles y tachas reflectivas. Son accesorios usuales en otros distritos, pero en Escobar se ven por primera vez en el marco de una iniciativa municipal financiada por el Banco Mundial.
La Dirección de Tránsito y Seguridad Vial del Municipio comenzó a desarrollar esta semana una serie de intervenciones en la vía pública que consisten en la instalación de delineadores flexibles y tachas sobre arterias con mucha circulación vehicular.
Hasta el momento se colocaron decenas de delineadores flexibles rebatibles en un tramo de la ruta provincial 26, desde la rotonda de Colectora Oeste en dirección a Maquinista Savio, y sobre la avenida 25 de Mayo, entre Alberdi y Pellegrini, en la entrada de Escobar.
Estos dispositivos verticales y amarillos son muy comunes en otros distritos, pero en el partido de Escobar se ven por primera vez. Su función es contribuir a regular y encauzar adecuadamente la circulación al delimitar zonas y carriles exclusivos, evitando así, por ejemplo, adelantamientos y sobrepasos imprudentes.
Los delineadores, pese a su aspecto rígido, están fabricados en poliuretano flexible, un material que les confiere la capacidad de resistir repetidas colisiones de vehículos y aplastamientos en todas las direcciones volviendo a su posición inicial.
Carriles separados. Los nuevos dispositivos también fueron colocados en dos cuadras de la avenida 25 de Mayo.
Desde la Comuna informaron que durante la semana que viene también se instalarán tachas viales reflectivas en la ruta 26, en el mismo trayecto de los delineadores. Estos elementos, que tienen la forma de una pirámide truncada, son utilizados para dar mayor visibilidad a la separación de los carriles, así como a las sendas peatonales y para ciclistas.
La adquisición y colocación de los delineadores y las tachas se enmarca en un programa municipal de seguridad vial para el cual el Municipio recibió un desembolso no reintegrable de $3,5 millones del Banco Mundial, a través de una gestión de la Agencia Nacional de Seguridad Vial.
Del mismo modo, también se colocaron carteles indicando los límites de velocidad en distintos cruces de calles y se desarrollarán campañas de concientización.
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