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“No perdimos los objetivos, los valores ni nuestro espíritu fundacional”, destacó la directora Judith Russo, durante un acto con pasajes emotivos.
Judith Russo exhortó a "compartir la educación con respeto y alegría".
La Escuela Media N° 4 de Ingeniero Maschwitz, todavía más conocida como “el Nacional”, celebró este viernes 30 sus bodas de plata con un acto que embargó de emoción a su comunidad educativa.
La festiva jornada comenzó pasadas las 10, con el descubrimiento de placas aportadas por el Municipio, el Concejo Deliberante y el Rotary Club local en un pasillo del establecimiento. Una cuarta placa fue costeada por la docente jubilada Eglis Bressán de Blanco, que fue directora del colegio hasta el año pasado y desde el día de su apertura, el 12 de marzo de 1984.
El acto protocolar se desarrolló en el patio del gran edificio escolar, situado frente a la plaza Mitre, sobre las calles La Plata y Maipú. “Estas bodas de plata nos enorgullecen, porque durante estos años mucha gente trabajó para que sea posible”, remarcó la directora Judith Russo en su alocución.
“Los cambios en la educación nos atravesaron y cambiamos conceptos, pero no perdimos los objetivos, los valores ni nuestro espíritu fundacional”, agregó Russo, quien exhortó a docentes y alumnos a “compartir la educación con respeto y alegría”.
Entre los invitados al acto estuvieron los concejales Ana Padilla, Luis Moro, Roberto Palau e Iris Pavoni; el presidente del Consejo Escolar, José Luis Fabbro; la directora del CIE, Graciela Maydana; la inspectora de nivel medio Sonia Di Nápoli y representantes del Rotary Club de Maschwitz.
Como en todo encuentro de estas características, obviamente que abundaron expresiones de emoción en muchos de los participantes, además de recuerdos y anécdotas de estos primeros 25 años del eterno “Nacional”.
