Las tareas de saneamiento abarcan una superficie lineal de 7.500 metros, en Garín, Escobar y Loma Verde. Se retiraron desde autos y electrodomésticos hasta neumáticos y camalotes que quedaron de la última crecida del Paraná.
Los equipos de la Secretaría de Planificación e Infraestructura del Municipio se encuentran realizando tareas de limpieza en los arroyos Garín, Tajamar, Tatán y en un ramal del Escobar. En total, la superficie de saneamiento abarca 7.500 metros lineales.
La meta de estos trabajos es liberar a los cauces de agua de objetos que tapen su flujo regular, para así evitar desbordes que afecten a los vecinos de zonas aledañas, principalmente en las jornadas de lluvias o tormentas.
En el arroyo Garín se trabajó desde el límite con la ruta 9 y desde las vías del ferrocarril Mitre, a lo largo de 1.000 metros aguas arriba. En esa zona se realizó una limpieza de vegetación, basura, neumáticos, vehículos y electrodomésticos que habían sido arrojados sobre el curso de agua. También se rectificaron los cauces y los taludes.
Por su parte, en el Tajamar se limpió desde la calle Manny hacia el río Luján, en un espacio de 3.000 metros. Se trabajó en su ensanche y también se retiraron camalotes que quedaron de la última crecida del Río Paraná.
En el Tatán se retiraron residuos y se desmalezaron los márgenes en una extensión total de 1.500 metros, que abarca desde la Panamericana hasta las vías del ferrocarril Mitre y hasta la calle Los Tilos. En tanto que en un ramal del arroyo Escobar se está reconstruyendo el cauce y retirando desechos en general.
“Estas son obras que no se ven, pero que resultan fundamentales para que suframos menos inundaciones y enfermedades. Desde la Municipalidad cumplimos en sanear los cauces de agua del distrito, ahora es responsabilidad de todos cuidar nuestros arroyos y el medio ambiente”, señaló el intendente Ariel Sujarchuk en un comunicado.