Al final, lo que había en el mate de la sala Menem Jr. no era droga sino un sedante

Hace una semana, siete trabajadores de la sala de primeros auxilios Carlos Menem Jr., ubicada en el barrio Lambertuchi de Belén de Escobar, sufrieron un aparente cuadro de intoxicación. Enseguida se determinó que fue al tomar un mate que estaría contaminado con una sustancia desconocida, que había sido mezclada con el azúcar.

La conmoción de las primeras horas de ese miércoles fue pasando a medida que la situación se normalizó. En un primer momento, seis mujeres y un médico habían experimentado mareos, somnolencia y baja presión. Algunas personas se recuperaron más rápido, pero otras tres debieron ser internadas en el hospital Erill.

Al día siguiente todas habían sido dadas de alta y la mayoría estaba de regreso en el trabajo. Entretanto, desde la Secretaría de Salud Pública se radicó una denuncia penal en la fiscalía de turno, al tiempo que se instruyó un sumario administrativo interno para identificar al responsable.

Aunque todavía no se sabe quién estuvo detrás de esta aparente broma pesada, lo que ya se pudo establecer es que los comprimidos fraccionados que se encontraron en el interior del frasco de azúcar no eran una droga prohibida, como inicialmente se deslizó en un comunicado oficial, donde se mencionó la posibilidad de una «sustancia psicoactiva».

Los estudios con reactivos que se practicaron sobre esas cápsulas dieron como resultado que se trataba de un sedante, según confiaron fuentes del Ejecutivo consultadas por El Día de Escobar. Ahora, sólo falta dar con el culpable y saber con qué intención hizo algo así. Por lo pronto, desde el Municipio ya se habla de una «sanción ejemplificadora».