A pesar de que no se están dictando clases presenciales, hay instituciones que pretenden seguir cobrando seguro, mantenimiento y material didáctico. También denuncian intimaciones a quienes se retrasan en el pago.
Con la actividad escolar convencional interrumpida por tiempo indefinido, las clases se trasladaron a las computadoras, tablets y dispositivos móviles. Allí, día a día, los docentes deben apelar a su ingenio, creatividad y pedagogía para tratar que los alumnos estudien y aprendan desde sus casas.
Mientras tanto, las cuotas de los colegios privados son un tema aparte. Es que la mayoría de las instituciones no estaría descontando ítems como el seguro escolar, el mantenimiento edilicio y el material didáctico, a pesar de que la modalidad a distancia exime de todos ellos.
Esta situación sería común a varias de las instituciones educativas más importantes de Belén de Escobar, como el Instituto San Vicente de Paul, el colegio Dante Alighieri y el Instituto General Belgrano, según pudo averiguar El Día de Escobar.
El colegio Santa María también está envuelto en esta polémica. “Solo nos exceptuaron de pagar el seguro escolar, que es de $110. No así lo que está por fuera del pago general, que es el equipamiento didáctico y el mantenimiento. Nosotros nos preguntamos si tiene sentido cobrar eso si las clases no van a volver hasta agosto, que es lo que dijo el ministro de Educación”, expresó a este medio una madre de dos alumnos de este establecimiento.
Padres y madres del colegio Santa María se organizaron para reclamar formalmente a las autoridades del establecimiento, a quienes también cuestionan la poca flexibilidad para tener en cuenta a quiénes no pueden afrontar los pagos. Además, sostienen que a fin del año pasado se llevó adelante un aumento de cuotas mayor al que se había previsto.
“Contrariamente a lo que recomiendan desde el Ministerio de Educación, en vez de flexibilizar, extender fechas de los vencimientos o atender las situaciones particulares de las familias, han optado por ejercer más presión en esta situación angustiante que estamos viviendo”, reza una carta firmada por varios padres de esa comunidad educativa.
“Las empresas privadas, ante situaciones como estas, salen a buscar respaldo financiero, no empiezan a llamar a sus clientes para que le paguen lo que no tienen (está todo parado) o lo que no pueden por falta de centrales de pago disponibles”, sostienen en la misiva.
“Vivimos algo insólito, extraordinario. Algunos tenemos la suerte de hacer la cuarentena, mientras otros se ven obligados a salir a trabajar. Somos docentes, psicopedagogos, psicólogos y hasta fonoaudiólogos de nuestros hijos, tratando de imitar la labor de las señoritas, y a ustedes por lo único que se les ocurre es llamar para preguntar ¿por qué en marzo no se pagó?”, afirman en otro duro párrafo.
Por ahora, el petitorio de los padres no recibió una respuesta de quienes dirigen el colegio religioso.
Padres de alumnos de colegios privados reclaman una quita en las cuotas.
A pesar de que no se están dictando clases presenciales, hay instituciones que pretenden seguir cobrando seguro, mantenimiento y material didáctico. También denuncian intimaciones. https://t.co/857RSlngq9 pic.twitter.com/bq680p4mDj
— El Día de Escobar (@eldiadeescobar) April 21, 2020