Hace años que transitar por la calle Rivadavia, a la altura de la terminal de ómnibus de Escobar, se convirtió en un verdadero martirio para los automovilistas y colectiveros, no solo por la cantidad sino también por la profundidad de los baches.
Pese a que en 2016 el Municipio repavimentó varios tramos de esa arteria, los que no fueron intervenidos siguieron deteriorándose de manera descomunal, particularmente en las inmediaciones de Rivadavia y Spadaccini, donde la sucesión de baches de grandes proporciones hacía casi imposible esquivarlos.
Probablemente la proximidad de la Fiesta Nacional de la Flor y de las elecciones generales haya contribuido para que la Secretaría de Infraestructura decidida realizar este lunes un bacheo asfáltico que, aunque sea de manera provisoria, permitirá que circular por la zona ya no implique poner en riesgo el tren delantero de los vehículos.