Se llama Ezequiel Gómez Camejo, tiene 25 años y vive en Garín. La Policía llegó a él tras rastrear el teléfono celular que le habría robado a la víctima, quien apareció ahorcado y acuchillado en su dormitorio el viernes 18 de agosto.
Tan solo dos semanas después del crimen de José Luis Gómez (46), el hombre que apareció ahorcado con un cable en su casa del barrio El Candil, en Belén de Escobar, la Policía Bonaerense detuvo al presunto asesino en una vivienda de la localidad de Garín.
Se trata de un joven de 25 años identificado como Ezequiel Marcelo Gómez Camejo, quien trabaja como taxi boy y habría llegado al domicilio de la calle Monsalvo 2324, tras ser contratado por la víctima.
Para los investigadores del caso, fue él quien mató a golpes y cuchilladas al hombre y sostienen su hipótesis en una prueba fundamental: antes de darse a la fuga, Camejo le habría robado a la víctima una billetera y un teléfono celular, a través del cual los pesquisas lograron rastrearlo.
Tras analizar distintos perfiles de Facebook y llevar a cabo un seguimiento de las llamadas telefónicas realizadas con el móvil del fallecido, efectivos de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de Zárate-Campana, con apoyo logístico de la comisaría 1ra de Escobar, pudieron dar con el domicilio del sospechoso, ubicado en la calle Pueyrredón 3435, en el barrio Cri Cri de Garín.
Así, el pasado viernes los policías realizaron un allanamiento por orden del Juzgado de Garantías N°3, a cargo del juez Luciano Marino, y lograron incautar un teléfono LG K8 color negro, cuyo número de IMEI correspondía al sustraído dos semanas atrás en la casa de Gómez.
La novia de Camejo, que se encontraba en la casa, habría revelado que él se lo había regalado el sábado 19, casualmente un día después del crimen. Asimismo, les informó que en ese momento su pareja se encontraba trabajando en el Bingo Oasis de Pilar.
Pero el procedimiento no terminó ahí y les deparó una mayor sorpresa a las autoridades. Cuando la fiscal Irene Molinari, titular de la UFI y Juicio N°6, evaluaba los pasos a seguir, ingresó de repente al domicilio el propio Gómez Camejo, quien enseguida fue aprehendido y quedó a disposición de la DDI de Zárate-Campana, según informaron fuentes policiales a El Día de Escobar.
De esta forma, en tan solo dos semanas, los pesquisas lograron detener al presunto asesino de José Gómez, quien trabajaba como auxiliar en la escuela 12 de Ingeniero Maschwitz.
Gómez Camejo deberá permanecer recluido en una cárcel hasta tanto la Justicia ordene la ejecución del juicio oral por el delito de “homicidio criminis causae”, el cual estipula una pena de reclusión o prisión perpetua.