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Sin certezas. Las fuentes policiales consultadas no supieron precisar pormemores sobre la muerte de Palombo.
Tenía 18 años y contaba con numerosos antecedentes, entre ellos una tentativa de homicidio. Habría sido ultimado de cuatro disparos en la cabeza tras un enfrentamiento con otro malviviente.
Un joven de 18 años que contaba con un frondoso prontuario fue asesinado este sábado a la madrugada en un presunto ajuste de cuentas ocurrido en el barrio Bedoya de Garín. Los vecinos, víctimas de su accionar delictivo, celebran su muerte en las redes sociales.
La víctima se llamaba Matías Palombo, quien desde hace mucho tiempo tenía a maltraer a los vecinos de los barrios Cri Cri y Bedoya, donde robó, golpeó y disparó hasta el hartazgo, según el testimonio de sus propias víctimas. Justamente, fue en este último vecindario de la ciudad donde murió cerca de las 4 de la madrugada luego de ser baleado en un hecho del que, hasta ahora, poco se sabe.
Desde la Jefatura Distrital de Policía informaron a El Día de Escobar que Palombo falleció en el patio de la casa de su madrina, en la calle Brasil 1187, donde ingresó pidiendo auxilio con una herida de bala en uno de sus músculos intercostales derechos. “No sabemos qué paso”, explicaron las fuentes al ser consultadas sobre las circunstancias del hecho.
Mientras tanto, vecinos del barrio contradijeron la versión oficial y avisaron a este medio que el conocido malviviente fue ultimado de cuatro disparos en la cabeza tras comenzar una reyerta con otro delincuente de la zona.
Según los mismos testimonios, Palombo habría tiroteado la casa de este sujeto -se desconoce su identidad- por un conflicto que mantendrían desde hace algún tiempo. Como respuesta, el dueño de la vivienda baleada lo fue a buscar con otras personas y cuando lo encontró le efectuó varios disparos hasta acabar con su vida.
Los vecinos de los barrios Bedoya y Cri Cri celebraron efusivamente en redes sociales la muerte de Palombo, sobre quien pesaba un pedido de captura activo por “tentativa de homicidio”, entre otros delitos de presunta autoría suya.
“¡Justicia! Tanto mal que ha hecho le volvió”. “Al fin la justicia llegó. Tarde pero seguro”. “El pibe hizo lo que quiso y así terminó. ¡Uno menos!”. Estas y otras tantas expresiones por el estilo fueron vertidas por los vecinos en la comunidad de Facebook Sumate a Garín, donde muchas víctimas del joven también se animaron a narrar sus propias experiencias.
“Yo tuve que dejar mi trabajo porque un día, cuando llegaba de trabajar, casi a las 2 de la mañana, este chico me asaltó y estuve cuatro meses con ataques de pánico, ya que me puso un cuchillo en el cuello y me golpeó. Es horrible tener que andar con miedo a que te hagan algo”, expresó una mujer, en medio de la catarsis colectiva que invadió la red social tras conocerse el hecho.
“No se olviden que este señor incendió una casa con gente adentro y mató a una familia entera”, denunció otro vecino, haciendo referencia a un trágico episodio ocurrido en el barrio Bedoya en la madrugada del jueves 14 de noviembre de 2014, donde murieron cuatro personas y por el cual no hubo detenidos.
La causa por el deceso del joven fue caratulada “Homicidio” y quedó a cargo de la UFIJ N°6 de Zárate-Campana.
