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Más de diez mil vecinos se manifestaron pacíficamente en el centro de Escobar por el asesinato de Martín Scaldafferro. “Ojalá sirva para que se haga justicia”, expresó un tío del joven apuñalado hace una semana en una entradera.
A exactamente una semana de la entradera en la que fue mortalmente herido el joven Martín Scaldafferro (16), más de 10 mil vecinos de todo el distrito marcharon este viernes a la tarde por el centro de Belén de Escobar para reclamar el esclarecimiento del salvaje crimen, cuyos autores aún permanecen prófugos.
Bajo la consigna “Todos por Martín”, familiares, amigos, comerciantes y vecinos se concentraron a partir de las 19 en la plaza General San Martín y minutos después dieron inicio a una marcha que sin lugar a dudas se inscribirá entre las más trascendentes y significativas de la historia del distrito, tanto por la impresionante convocatoria, como por el respetuoso y estremecedor silencio con el que se llevó a cabo.
Al igual que el lunes pasado, cuando se realizó la primera marcha del silencio en reclamo de justicia, los amigos y compañeros del joven Scaldafferro del Instituto Santa María, donde cursaba el quinto año, fueron los encargados de encabezar, con pancartas y velas en mano, la interminable columna de manifestantes que se extendió a lo largo y ancho de siete cuadras del casco céntrico.
Finalmente, tras poco más de media hora de recorrido por la avenida Tapia de Cruz y las calles Belgrano, Estrada y Mitre, que incluyó una indiferente pasada frente al Palacio Municipal, la pacífica peregrinación retornó a su punto de partida. Allí, y luego de algunos minutos de inquebrantable y conmovedor silencio colectivo, una de las tías del “Negrito”, como le decían los conocidos a Martín, rompió el molde y leyó una carta.
“Nos resulta increíble pedir justicia por Martín, porque lo realmente justo sería que la próxima vez que vayamos a la casa de Daniela -su madre- y Gerardo -su padre, quien también fue herido pero ya recibió el alta médica-, él estuviera ahí, como siempre. Eso es imposible, por eso, con el profundo dolor de lo irremediable, pedimos justicia. Justicia para que no haya otras víctimas, y para que se esclarezcan los casos de tantas familias que también están pasando lo mismo que nosotros”, exclamó, con la voz quebrada, Carla Leonardi.
En ese sentido, la manifestación también incluyó el reclamo por otros asesinatos ocurridos en los últimos años, la mayoría de los cuales no fueron esclarecidos, entre otros: Marilina Romero (2016), de Matheu; Claudio Verón (2016), de Loma Verde; Paula Cufré (2016), de Maschwitz; Hugo Cardozo (2015), de Belén de Escobar; Fernando Escalón (2014) y Juan Carlos López (2014), de Garín; Noemí Condori (2012), de Matheu; y Gustavo Repetti (2000), de Ingeniero Maschwitz.
“Pedimos, a quienes corresponda, que se intervenga en dos caminos: que la persona que mató a Martín, y sus cómplices, tengan la condena que se merecen. Que la Justicia sea justa, para que aquel que cometa algún delito lo pague. Para que aquellos que ya son incapaces de valorar la vida, piensen dos veces antes de cometer un crimen, porque su accionar tiene consecuencias”.
“Y que se trabaje sobre lo más profundo, para evitar que exista la violencia generada por la desigualdad de oportunidades. Porque si todo vivimos bien, el crimen quedará reducido a unos pocos perversos”, reflexionó la tía de Martín Scaldaferro.
Por su parte, Adrián Leonardi, otro de los tíos del adolescente cruelmente asesinado en su casa por un grupo de malvivientes el pasado viernes 12, quienes a pesar de la intensa búsqueda policial todavía permanecen prófugos, tomó el micrófono para agradecer “en nombre de la familia” a todos los presentes “por esta manifestación”, a la que definió “como un abrazo al alma”.
“Ojalá que sirva para que se haga justicia. Y esto no debe cortarse. Tenemos que volver a juntarnos para que las autoridades tomen nota y empiecen a actuar como tienen que actuar”, concluyó, pasadas las 20, el conocido vecino y comerciante de la ciudad, levantando así el aplauso cerrado de los más de 10 mil vecinos que, cansados de la inseguridad y la impunidad, salieron a la calle para gritar en silencio: ¡No más Martín!
Por Damián Fernández
Cobertura fotográfica: Ricardo Pedersen
