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A veinticuatro horas de haber asumido en forma interina la Intendencia de Escobar, Walter Hugo Blanco dejó atrás el mutismo que había mantenido durante todo el año y este martes a la mañana dio a conocer los primeros lineamientos de la gestión que desarrollará a partir del alejamiento de Sandro Guzmán, quien próximamente asumirá como diputado nacional del Frente Renovador.
Cual actor en pleno lanzamiento de su nueva película, el otrora jefe de Gabinete y primer concejal electo en 2011 adoptó para su reaparición pública el poco usual formato de una rueda de prensa -con desayuno incluido-, en la atendió uno a uno a más de treinta periodistas locales y de la región, actividad que le insumió más de cuatro horas de declaraciones casi sin pausa. Fue en un salón de eventos de la Colectora Este, en Belén de Escobar, desde las 8.30 y hasta pasado el mediodía.
En el plano político, el principal interrogante sobre Blanco era si volvería a encolumnar al distrito en las filas del Frente para la Victoria. En ese sentido, manifestó que mantendrá a Escobar apartado de cualquier bandería política y que apostará al consenso con las distintas fuerzas. “No existe otra camiseta que no sea la de resolverle los problemas a la gente, eso es lo que nos dijo la ciudadanía el 27 de octubre”, evaluó en referencia a los resultados de las recientes elecciones legislativas.
“Mientras menos expresemos una tendencia política y más nos aboquemos sobre los problemas, mejor nos vas a ir a todos y el reconocimiento va a ser mayor”, amplió durante el mano a mano con EL DIA de Escobar. No obstante, dijo que buscará recomponer las relaciones con la Nación y la Provincia y se mostró optimista en destrabar la financiación para obras de gran escala como la repavimentación del camino al Paraná y la construcción de 274 viviendas sociales en Maquinista Savio, entre otras por las que se habían firmado convenios. “Creo que entre todos vamos a encontrar las soluciones”, confió.
Sobre la gestión de gobierno propiamente dicha, se resistió a calificar su asunción como el comienzo de una “nueva etapa”, aunque descontó que habrá notorias diferencias de impronta. “Con Sandro somos dos personas distintas. Y si bien somos amigos, compañeros y hablamos casi todos los días, tenemos estilos distintos. A mí me gusta mucho más ir al debate de ideas, ir a los barrios, caminar, no tener filtro con el vecino, y no tomarme tanto el tiempo para lo protocolar, aunque tendré que adaptarme”, expresó a la hora de trazar diferencias con quien es su socio político desde 2007.
A modo de diagnóstico preliminar, señaló que el déficit en el alumbrado público es el “principal problema” a resolver. “Tenemos que mejorarlo denodadamente”, apuntó. En un plano de igualdad ubicó a los demás servicios básicos y a la inseguridad como los frentes a priorizar. “Hay falencias en el área de servicios que claramente tenemos que resolver. Ese es el gran desafío”, remarcó.
Asimismo, pidió tiempo y paciencia para poder hacer un pantallazo más completo del cuadro de situación general del distrito y prometió que a mediados de febrero presentará un plan integral de gestión para todas las áreas. “Todo es perfectible y nosotros tenemos mucho para mejorar, no me caben dudas”, admitió.
“Quiero dar el ejemplo y ser el trabajador con más responsabilidad en el Municipio”, afirmó el nuevo intendente.
Cuando se le consultó si los tres primeros concejales electos por el Frente Renovador -Germán Maldonado, Sebastián Rey y Gabriela Garrone- seguirán integrando el staff superior del Ejecutivo, dijo que la decisión de asumir en sus bancas o continuar en las secretarías que actualmente manejan será exclusivamente de ellos. También aclaró que no tendrá un jefe de Gabinete y que la premisa será “que no haya dirigentes haciendo política sino trabajadores al frente de los problemas”.
En ese ítem, Blanco se explayó sobre el rol de los empleados municipales, para quienes anunció “un incremento salarial que va a sorprender”. “El motor de la gestión es el trabajador. Si mejoramos su escala salarial, sus condiciones de trabajo, que se sienta orgulloso y contento de tener un uniforme municipal y le despertamos esa conciencia de amor por la institución, tenemos que mejorar sí o sí en los servicios”, insistió.
“La única vara es la del trabajo. Y en eso quiero dar el ejemplo y ser el trabajador con más responsabilidad en el Municipio, abstrayéndome de toda cuestión partidaria y política. Yo entro 6.30, 7 de la mañana. A partir de ahí se forma una forma y un estilo”, aseveró el nuevo ocupante del sillón de Lambertuchi.
En otras definiciones, también afirmó que “no habrá piloto automático” en la conducción de la Comuna, que no piensa postularse para intendente en 2015 y que tiene “un montón de ideas para mandar al Legislativo”.
El tiempo pautado para las entrevistas no permitió ahondar en varios aspectos o formular otras muchas preguntas que quedaron en el tintero, quizás para una próxima y no muy lejana ocasión, si es que la apertura hacia los medios también será una de las características que Blanco le imprimirá a su estadía en la Intendencia de Escobar.
Entrevista: Ciro D. Yacuzzi
Fotografía: Ricardo Pedersen
