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Leonardo Ramos festeja su gol y el de la victoria del tricolor en la isla Maciel. Atrás, Federico Pacheco sonríe.
Dicen que la esperanza es lo último que se pierde. Y por eso Deportivo Armenio mantiene viva la ilusión del casi milagro que sería, a esta altura, alcanzar el Reducido para pelear por el segundo ascenso al Nacional B: quedan 18 puntos en juego y está a 10 del quinto, que es Estudiantes de Buenos Aires, su verdugo del pasado fin de semana. Como sea, el tricolor volvió a la victoria al superar a San Telmo por 1 a 0 y la calculadora le sigue diciendo que, por ahora, nada es imposible.
Leonardo Ramos, a los 28’ del segundo tiempo, marcó el único gol de la tarde del martes en la isla Maciel, tras cabecear en soledad un córner lanzado desde la derecha por Gastón Lolli.
Armenio, que venía de caer 1-4 en Maschwitz frente al Pincha de Caseros, justificó la victoria a partir del control del partido, con posesión del balón, circulación y algunas aproximaciones de peligro al arco defendido por Abraham. San Telmo, que está casi descendido, cayó sin ofrecer resistencia y al final del partido su técnico, Rubén Agüero, presentó la renuncia tras un palmarés de 1 triunfo, 2 empates y 7 derrotas.
Con este resultado, correspondiente a la 35º fecha, el equipo de la colectividad aumentó a 7 su racha de partidos sin perder con el Candombero -la última vez fue en 2003-, llegó a los 45 puntos (10-15-9) y escaló a la 11º posición.
La lucha por el campeonato está que arde: Atlanta (58) volvió a perder y si San Carlos (57) vence a Acassuso será el nuevo puntero de la B Metropolitana. Mientras tanto, Brown de Adrogué (56), Chacarita, Estudiantes (55), Platense (54) y Temperley (51) se mantienen a la expectativa.
En la próxima fecha Armenio viajará a Campana para enfrentar este sábado, desde las 15.30, a Villa Dálmine, en el clásico del norte.
Fotografía: infodeportivoarmenio.blogspot.com
