FM Bárbara y su dueño, “Tony” Guerra, serían sancionados por el Concejo Deliberante de Escobar por haber cobrado entrada para un espectáculo en la vía pública pese a una expresa prohibición municipal para hacerlo.
El episodio protagonizado por el acólito oficialista dueño de la popular radio de música tropical de la ruta 26 tuvo lugar el pasado domingo 18. Guerra había conseguido que el Municipio le permita utilizar la calle El Ruiseñor, frente al polideportivo Juan Perón, para organizar un espectáculo público con motivo del aniversario de su emisora. Pero, de manera explícita, se le aclaró en el mismo expediente que no podría expender entradas para el evento, una fiesta cumbiera animada por La Banda de Lechuga, El Original y La Re Pandilla.
Pese a lo impuesto por las autoridades, Guerra cercó la calle con un tendido de alambre y medias sombras, para asegurarse de que nadie pueda ingresar ni ver el espectáculo sin pagar una entrada de $ 25 en una casilla de madera que hacía las veces de boletería.
Alertado por vecinos, el concejal José “Coty” Rognone se apersonó en el polideportivo y constató las flagrantes transgresiones.
Con pruebas fotográficas y testimoniales, el concejal oficialista de Savio dio parte del caso al intendente Sandro Guzmán y presentó un expediente en el Concejo Deliberante promoviendo la aplicación de sanciones a Guerra y su emisora.
“No debemos permitir que acciones inescrupulosas como la desarrollada por FM Bárbara (96.5 Mhz), y su responsable Antonio Guerra, empañen la política de difusión cultural que viene desarrollando el Departamento Ejecutivo en distintos barrios de nuestro distrito”, argumentó Rognone en su proyecto de ordenanza.
Además, sostuvo que “acciones de esta índole merecen ser sancionadas ejemplarmente, dado que afectan la imagen de instituciones como la Municipalidad y la Policía, por cuanto son burladas en su buena fe, no cumpliendo con las condiciones de la autorización municipal otorgada y realizando un evento con fines de lucro donde se evidencia falta de control fiscal”.
Según lo establecido para este tipo de conductas por la ordenanza 2529/97, en su artículo 15º, “cuando se detectare evasión tributaria por parte de los organizadores, los mismos serán inhabilitados para peticionar nuevas solicitudes de autorización para realizar espectáculos”. Y esa es la sanción que Rognone pide para Guerra, quien además debería reintegrarles a los asistentes el dinero que les cobró indebidamente.